Capítulo 636
Leonardo heló, bajando la voz, -Lo de Clave Secreta, olvídalo como si nunca lo hubiera dicho.
Natalie se mofó, -¿Crees que puedo olvidarlo?
Leonardo la miró y dijo con indiferencia: -Este asunto no tiene nada que ver contigo, sólo no quiero que te involucres, así al menos puedes estar en guardia contra Javier cuando estás con él.
-También he dicho que Javier no me hará daño.
-No hace falta que me preguntes por la clave secreta. ¿Todavía te gusto? ¿Te preocupas por mí?
Natalie se quedó helada y frunció el ceño: -Piensas demasiado, ya no te quiero.
-Entonces deją de preguntarme por la clave secreta.
Leonardo no volvió a mirarla y se dio la vuelta para marcharse enseguida.
Dijo Fausto con rabia desde atrás.
-Leonardo, ¿qué le has hecho al Grupo Ruiz?
Cuando Leonardo se dio la vuelta, Fausto se abalanzó sobre él con un puño.
Retrocedió dos pasos para esquivarlo y miró fríamente a Fausto, Te lo advertí, pero tú no
paraste.
Fausto rió fríamente, -¿Crees que puedes acabar con el Grupo Ruiz? ¡No voy a dejar quebrar al Grupo Ruiz!
Debes pensar en cómo conseguir que esos inversores reanuden la cooperación con Grupo Ruiz, sino decirme tonterías aquí. -Leonardo se dio la vuelta y entró en el Grupo Ramos.
Fausto se fijaba en su espalda con ira y odio en los ojos.
Natalie, que lo ha visto todo, se sorprendió y tuvo el mal presentimiento de que la mala relación de Leonardo con Fausto tenía algo que ver con ella.
Se acercó a Fausto, -Señor Ruiz, ¿tengo algo que ver con que tú y el señor Ramos lo pasen tan
mal?
Fausto giró la cabeza hacia ella y bajó los ojos, Natalie, lo siento.
—
Natalie frunció el ceño, ¿Por qué me pides perdón.
—Le dije a Pilar que Leonardo y tú no estén divorciados, y le ordené que te dijera a ti.
Natalie se quedó paralizada, incrédula y sorprendida.
1/2
Después de un largo rato, se mordió el labio inferior y dijo: -¿Entonces por qué me dices la verdad ahora?
Tenía el rostro helado y miraba a Fausto como a un extraño.
Fausto scnrió amargamente: -Porque creo que hice mal. Aunque ahora estás separada de Leonardo, no pareces ser feliz.
Natalie evitó la mirada de Fausto y dijo: -Me lo ocultó Leonardo esto, aunque sin ti, algún día descubriré la verdad, no puedo culparte, pero tampoco volveré a ponerme en contacto contigo.
Si Fausto le hubiera dicho esto directamente, ella podría tratar a Fausto como un amigo, pero él utilizó a Pilar para decirlo, sólo para separarlos por completo.
A Natalie le importaba más que una mujer que llevaba poco tiempo con Leonardo supiera que no estaban divorciados.
Fausto lo sabía perfectamente y no dudó en aprovecharse de ello.
que lo
que
Fausto se puso nervioso y se apresuró a decir: -Natalie, admito
hice fue, en efecto, un poco cabrón, ¡pero me gustas de verdad! Y ahora que Leonardo y tú están divorciados, me quedaré a tu lado hasta que puedas darme una oportunidad. 1
Natalie se impacientó y dijo fríamente: -Señor Ruiz, no quiero ser amiga de alguien que me hace trampa, espero que te alejes de mí en el futuro.
-¡No me rendiré! -Había firmeza y amor en la mirada de Fausto.
-Lo que quieras.
Natalie se dio la vuelta, sin ver que la mirada de Fausto se volvía gradualmente fría mientras la
observaba.