Capítulo 140
Tina negó con la cabeza y respondió en voz baja: -No, sólo cosas de familia,
Al escuchar eso, Natalie no indagó más. De acuerdo, ya veo. Si necesitas ayuda, contáctame cuando sea.
-Claro, gracias.
Poco después de que Tina se fuera, Natalie recibió una llamada inesperada de los organizadores del Concurso Nacional de Diseño de Moda.
Hola, buenos días, ¿es usted la señorita Natalie López? Es que el concurso de diseño de este año se llevará a cabo en Monteflor el próximo mes, y nos gustaría invitarla como juez. ¿Me gustaría saber si está disponible?
Desde que Natalie había ganado el campeonato en dicho concurso durante tres años
consecutivos, los organizadores la contactaban cada año cuando comenzaba el registro de la competencia, invitándola a ser juez.
Anteriormente, había rechazado cada vez porque tenía que cuidar de Leonardo.
Pero esta vez, aceptó después de una breve reflexión.
-Sí, estoy disponible. Por favor, envíeme la fecha y la ubicación para que yo pueda organizar mi agenda.
Hubo silencio al otro lado durante unos segundos y eso confundió a Natalie, quien echó un vistazo a la pantalla de su celular.
-¿Hola? ¿Me puede escuchar? Qué raro, ¿es que se cortó la línea…?
—¡Sí, puedo escucharla! ¡Ahorita le enviaré la fecha y la ubicación!
-Perfecto.
Después de colgar, el personal le mandó un mensaje a Natalie sobre la fecha y la ubicación, y acto seguido, se dirigió emocionado a la oficina del gerente.
-¡Jefe, la señorita López aceptó ser juez!
Ante esa noticia, el gerente levantó la cabeza, incrédulo, y preguntó: -¿Estás seguro
-¿Estás seguro de que no malinterpretaste?
¡Por supuesto que no! Incluso me pidió que le enviara la fecha y la ubicación.
–
Una vez confirmado que Natalie realmente había aceptado, el gerente ordenó deprisa: —¡ Llama ahora mismo al Departamento de Relaciones Públicas y haz que anuncien que Elia será uno de los jueces en el Concurso Nacional de Diseño de Moda de este año!
1/3
+15 BONUS
-¡Entendido!
Al poco tiempo, esa novedad se difundió como la pólvora, e incluso llegó a ser tendencia en Twitter. La gente en línea estaba emocionada, discutiendo y expresando su intención de participar er: el concurso.
[Si yo pudiera recibir comentarios de Elía, jno estaría tan mal participar en este concurso!]
[Oí que Elia siempre ha mantenido un perfil bajo. Los organizadores la han invitado muchas veces, pero nunca aceptó. ¿Es que está planeando tomar aprendices si accedió a ser juez?]
[Recuerdo que Elia fundó un estudio, ¿no? Tal vez quiere reclutar diseñadores para su estudio, por eso aceptó este año ser juez.]
[¡Ah! ¡Ella es mi ídolo! Escuché que en la final, no sólo los concursantes diseñan ropa en el lugar, sino que los jueces también brindan críticas en vivo. ¡Si no puedo llegar a la final, compraré un boleto sólo para verla!]
Como se discutía intensamente en línea, Matilda también se enteró de la noticia.
Hacía poco que se había registrado. Aunque había ganado algunos premios en concursos de
que sólo diseño en el extranjero, ahora que pretendía entrar en el mercado nacional, creía obtener resultados impresionantes en ese Concurso Nacional de Diseño de Moda le ganaría reconocimiento.
Al pensarlo, se le ocurrió la promesa de Leonardo de adquirir MY Habiendo dudado por un momento, decidió finalmente llamarlo.
-¿Necesitas algo de mí?
para ella.
La voz de Leonardo sonaba indiferente, completamente contraria a la dulce anterior.
Matilda se mordió el labio y, tratando de reprimir su decepción, le preguntó: -Leo, ¿aún
mí? recuerdas tu promesa de adquirir MY para
En ese momento, Leonardo estaba revisando documentos. Al oír eso, hizo una pausa y respondió: -Sí, la recuerdo, pero ahora hay algunos problemas. Te daré otra empresa dentro de un tiempo.
Con la pérdida reflejada en los ojos, la voz de Matilde no pudo evitar bajarse. -¿Cuándo será?
-Dentro de tres meses, a lo sumo.
-Ya veo. Gracias, Leo.
-Tengo una reunión en breve. Ahora cuelgo.
Después de finalizar la llamada, Matilda apretó los labios, llena de tristeza. En el pasado, Leonardo esperaría a que ella colgara por muy ocupado que estuviera; ahora, en cambio, su
2/3
+15 BONUS
¡Y todo eso era por culpa esa puta de Natalie!
Con eso en mente, un destello de resentimiento brotó en los ojos de Matilda. Cuando estuviera al mismo nivel que Leonardo, él se daría cuenta de que Natalie no era en absoluto lo bastante buena para él, ¡y de que sólo ella era su pareja perfecta!
Mientras tanto, en las oficinas del Grupo Ramos.
Leonardo pidió a Carlos que fuera a su oficina e instruyó: -Recopila la información sobre la empresa Esplendor Bordado y entrégamela. Además, prepara los papeles necesarios, pues la transferiré a nombre de Matilda.
Una vez que se completara esa cosa, no le debería nada a Matilda.
Carlos asintió. -De acuerdo.
-Ya puedes retirarte.