Capítulo 134
Mamá, no hace falta, el otro día rompiste tu relación con Natalie en la rueda de prensa, Natalie debe seguir enfadada ahora, lo solucionaré yo misma.
Al oir este asunto, Beata se enfadó al instante, ¡Lo que ella quiera! Ya no es mi hija.
A las nueve de la noche, Natalie y Leonardo regresaron al chalet.
Ella se quitó el collar y se lo dio a Leonardo, -Gracias por esta noche.
Leonardo se puso serio y mirándola le dijo: -Este collar ya lo usaste, no se lo puedo dar a nadie más, guárdalo.
Natalie se lo pensó y dijo: -Cuánto cuesta, te lo pagaré.
-¿Tienes que ser tan claro conmigo?
Al notar que Leonardo se enfadaba, Natalie apretó los labios, -Señor Ramos, si no lo dejamos claro, la frontera entre nosotros se difuminará.
Como pronto se separarían, Natalie no quería enredarse demasiado.
Dijo Natalie: -Ha sido una noche agotadora, volveré a mi habitación, descansa bien.
Al cerrar la puerta del dormitorio, Natalie comprobó el precio del collar, ya que Leonardo lo compró en una subasta, Natalie encontró rápidamente el precio.
En cuanto vio esa cifra, Natalie quiso retractarse de lo que acababa de decir sobre pagar por él.
¡142 millones de dólares!
¡142 millones de dólares!
A causa de los 142 millones de dólares, Natalie perdió el sueño durante toda la noche y no podía imaginar cómo podría tener los 142 millones de dólares.
Si hubiera sabido que Leonardo había comprado un collar tan caro, ¡no se lo habría puesto!
A la mañana siguiente, Natalie salió del dormitorio con dos ojeras.
Ellos desayunaron en silencio y luego salieron a trabajar.
Justo cuando llegó a la entrada de la empresa, vio que el mostrador de recepción estaba lleno de flores y que había gente hablando a su lado.
-¡Caramba! Qué hombre tan generoso que regaló esto a su novia. ¡Qué envidia!
-Tantas flores, ¿hay sitio para ponerlas? ¡Creo que es un intento deliberado de mostrar su riqueza!
+16 BONUS
—- ¿Qué tiene que ver contigo que la gente muestre su riqueza? jsi tú fueras rico, podrías hacerlo también!
Natalie echó un vistazo y cuando se disponía a ir al ascensor, vio a Tina caminando rápidamente hacia la recepción.
-¡Tira todas estas flores a la papelera, y cualquiera que me traiga flores, que las tire! Natalie se sorprendió, ¿esas flores las trajeron los pretendientes de Tina?
Cuando Tina terminó, se dio la vuelta y vio a Natalie, acercándose rápidamente hacia ella,
–Natalie, subiré contigo.
Natalie fue arrastrada por Tina hasta el ascensor exclusivo para directivos de la empresa, y cuando el ascensor se cerró, Natalie preguntó vacilante: -¿Qué pretendiente es de tan alto perfil?
Tina dijo enfadada: -El psicópata Omar, me llamó anoche cuando estaba borracho y me dijo que lo sentía y que quería compensarme, pensé que hablaba de borrachera, pero no esperaba que me enviara un montón de flores esta mañana, jestá mal de la cabeza!
Natalie frunció el ceño, -¿Está intentando volver contigo?
-No lo sé, pero de ninguna manera volveré con él, jsoy alérgica a los cabrones!
Al ver a Tina tan firme, Natalie sonrió, -Supongo que hace poco Gisela le hizo daño.
Tina se mofó, No quiero meterme en sus mierdas, luego se calmará y dejará de esta locura.
–
El ascensor llegó a la última planta, se separaron en la entrada y volvieron a sus respectivos despachos.
Justo cuando se sentó en su silla, Natalie recibió una llamada de Lucía.
-Señorita López, llevo una semana en Monteflor, ¿por qué no me has llamado?
-Lucía, gran actriz de cine, estás tan ocupada que no me atreví a ponerme en contacto contigo.
Lucía gruñó, -Tengo tiempo siempre para ti aunque esté ocupada, he estado esperando a que me hicieras enchufe.
Natalie:
Si la gente supiera que la actriz ganadora de tres medallas de oro es así en privado, su imagen se vendría abajo, ¿no?