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Mi Frío Exmarido Capítulo 580

Capítulo 580

Descubrieron que Amelia estaba en un recodo del río donde la corriente que había causado el accidente se unía al río principal.

Quizás porque su destino no estaba sellado, la furiosa corriente la habia empujado hacia la orilla. Estaba inconsciente, con una herida sangrante en la cabeza y empapada de pies a cabeza.

La pérdida de sangre, sumada al clima helado, había dejado a Amelia luchando por su vida cuando la encontraron.

La situación era critica y desconocían la zona de Valverde. Además, la ubicación del accidente estaba lejos del centro urbano y el suelo resbaladizo por la lluvia no permitia esperar a una ambulancia.

La única esperanza para salvar a Amelia era su crucero.

Tenían un equipo médico de primer nivel a bordo y no estaban muy lejos. Lo más importante es que su madre, Miranda, era médico.

Aunque no era especialista en cardiologia ni neurocirugía, su extensa experiencia clínica le permitió darse cuenta de inmediato de la gravedad de la situación de Amelia. Sin perder tiempo, la subieron al auto y la llevaron al hospital del barco a toda velocidad.

El permiso para que su barco permaneciera en el puerto era limitado.

Después de regresar al barco, este zarpó del muelle.

Con la ayuda del equipo médico a bordo, Amelia logró superar el peligro inminente, pero la gran pérdida de sangre, la contusion intracraneal y la hipotermia por falta de oxígeno la mantuvieron en coma, hasta que después de tantos dias. hoy, con la llegada de Dorian al barco, tuvo su primer momento de consciencia, aunque solo fue una breve recuperación de su subconsciente.

Recién ahora había despertado de verdad.

Alejandro no sabía si era porque su madre la había rescatada de la muerte, pero Miranda parecía tener un cariño especial por ella.

Mientras Amelia aún no despertaba, Miranda iba varias veces al dia a verla y a menudo se quedaba mirándola absorta, como si no fuera simplemente una paciente más.

Como médico con más de treinta años de experiencia, Miranda había visto todo tipo de pacientes y habia salvado innumerables vidas. En teoria, Amelia no deberia ser más que otra paciente, por lo que ese afecto especial parecia fuera de lugar.

Pero el ver el modo en que Miranda miraba a Amelia, Alejandro tenía la impresión de que estaba viendo a otra persona

a través de Amelia..

No estaba seguro de quién podría ser.

Y tampoco queria saberlo.

En los últimos dos años, Miranda y él se habian distanciado por ciertas personas y circunstancias.

Al pensar en la persona que involuntariamente había causado el distanciamiento con su madre, el rostro de Alejandro se volvió frio y salió del hospital sin detenerse.

Su asistente Julián lo esperaba en la entrada del hospital y al verlo salir, lo saludó respetuosamente: “Sr. Terren.”

“Hola”

Alejandro respondió con indiferencia y continuó su camino hacia su camarote.

Julián miró hacia la entrada del hospital y le pregunto: “¿Cómo está la Srta. Soto?”

“Se despertó por un rato, dijo Alejandro sin detenerse, pero el hematoma intracraneal aún no se ha disipado, esta presionando el tejido cerebral y aún no sabemos si afectó algo más.”

Julián parecia sorprendido. “Ella perdió la memoria?”

Había un tono contradictorio en su sorpresa, como si estuviera aliviado.

Alejandro lo miró extrañado. ¿Pareces aliviado?”

Julian se apresuro a negar con una sonrisa. “Para nada, ni siquiera la conozco. Solo pensaba que si ella ha perdido la memoria, sería más fácil para usted usarla en el intercambio con Dorian por el muelle.”

En teoria, lo que decia tenía sentido.

Alejandro lo miró de reojo.

Julian inexplicablemente se enderezó.

“Sr. Julián, Alejandro lo llamó con voz tranquila, “¿conoces a la Srta. Soto?”

Julián negó con seriedad. “No.”

Alejandro lo observó por un momento.

Como su asistente de muchos años, Alejandro podía ver a través de cualquier mentira al instante.

La mirada de él le decía que realmente no reconocía a Amelia, pero en ese desconocimiento parecia haber mezcladas algunas otras cosas.

Alejandro no podía descifrarlo, tampoco veía la necesidad de investigar.

“Señor Julián.” Alejandro le recordó con voz serena, “La señorita Amelia es clave para que el Grupo Terrén pueda asegurarse el Puerto Fantasia sin problemas. No importa cuáles sean tus razones, no te atrevas a jugar con ella a la ligera.”

“Lo tengo en cuenta.” Julián respondió con la cabeza gacha,

“Además.” Alejandro habló de nuevo, “Todavía tenemos que observar si la señorita Amelia ha perdido la memoria, por ahora no se puede ver nada claro, no saques conclusiones apresuradas y tampoco reveles demasiado frente a ella. Para evitar chismes, nadie debe acercarse al hospital sin mi permiso de ahora en adelante.”

“Entendido.” Julián respondió respetuosamente otra vez.

Alejandro no dijo más y ya se había volteado para bajar las escaleras.

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