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Mi Frío Exmarido Capítulo 397

Capítulo 397

Detin e murals a Arnelia, solo extendió ens leazes y la abrazo suavemente

lantis

Estás un puan tam esta noche suono alla, sin empejar, “qué pas

pasó?”

contige

Hada, contesto el con your sonen Tecondd muchas cosas del pasado y con que to be fallado

Ho hay tala en que hayas folladan, respondia Amelia en voz baja Este camino lo elegi yo misma y cuando nos

la Casame, andma lo quianos He led presión de ingon lado, también tengo la responsabilidad

ningún

i

Mientras hallato, levanto la vista hasta el “Ael que no llenes por que contite culpable”

of sentide

borian la rund un momento y levantó la mano para locar su cabello, sin lecir una palabra.

En malidad, of juofonia que ella lo confrontata, que le reclamata por no prestade atención Cuando hay sentimienton, hay expectativas y no cuando importo.

De la contrato, una puede permanecer calmado y objetivo

Ahora, Amelia y el sole taban imidos por la necesidad de cuilar a su hija

Ella asistió Esta er

Fobin estala malono por no habor podido ver a Eduardo en el hospital

misiono

La licación del Cups Habin estala a punto de comenzar y sin conexiones que le allanaran el camino, estaba claro

Halsta grandes conglomerados.com proyectos editosos que querian competir por ese proyecto y su empresa no tenia

No es que realmente quisiera manejar un proyecto tan grande por si mismo, su idea inicial era asociarse, dejar que olm se llevarar la parte del loon y el llevarse na tajada

Antique al pasiples e acerco alla Mateo para colaborar pensando que si su socio se hacia con el proyecto completo, of podia incerta tuna pequeña parte y obtener in pedazo del pastel, con una inversión de unos pocos cientos de miles, quizá menos de un millón de dólares.

Consiguió acercarse a Mateo gracias a su estatus como cuñado de Dorian, y aunque el hombre no tenia el poder de los Fenei, tenia cierta reputación en el mundo inmobiliario de Arbolada.

Al principio, fue Mateo quien busco su apoyo, llamandolo hemmano.

Pero luego, sin saber cómo, Mateo se enteró de que Donan y Amelia se habian divorciado y comenzó a tratar a Fabio con indiferencia

Afortunadamente, Fabio siempre habia sido una persona decente y nunca habia menospreciado a nadie cuando estaba en una posición de poder, habia tratado bien a Mateo cuando este se acercó a él, por lo que, aunque dejara de importarle acercarse a él, no lo excluyó de su circulo de amigos.

Fabio sabia muy bien que para mantener una red de contactos a largo plazo, tenia que ser útil para los demás, Por eso, durante los últimos dos años, había trabajado duro para mantener su relación con Mateo. Además de los regalos habituales en fechas especiales, también lo ayudaba con pequeños problemas y asuntos, como organizar hospitalizaciones para sus familiares o matricular a los hijos de sus conocidos en escuelas, utilizando los contactos que hatsia acumulado a través de su relación con Dorian. También lo visitaba con frecuencia, ayudando en lo que podia, como servir mate, manejar el auto o recibir invitados, siempre estaba dispuesto a echar una mano.

Fabio penso que, con su relación con el Sr. Mateo, seria incluido en el proyecto del Grupo Sabino al menos recibiria algo, pero Mateo aún no habia mencionado nada al respecto.

Cuando Fabio insinuó el tema delicadamente, el solo respondió con una expresión de dificultad, diciéndole que él

Capitude 297

tampoco estaba seguro de poder ganar el proyecto de la familia Sabin y no queria perjudicario, pero le sugirió que también podria intentar participar en la licitación

Fabio no sabia si en las palabras de Mateo habia sincendado engaño, pero ahora que le habia dado la oportunidad de competir, no iba a dejarla pasar e dirigió a la casa de los Sabina Bevar un regalito y tantear el terreno

Al tratar con la gente de los Sabin, se dio cuenta de que no le tenian mucha estima

Sin embargo, no fue un viaje en vano, descubrir la relación entre los Sabin y los Ferrer fue un gran logro

Dado que Amelia habla vuelto con Dorian, Fabio pensó en usar la conexión con los Ferrer para persuadir a los Sabin

Pero ahora que no podia ver a Eduardo, estaba algo ansioso.

Habla considerado hablar con Dorian, pero siempre estaba ocupado y solia delegar sus asuntos a sus subordinados. quienes parecian cobrar sin trabajar, siempre con una sonrisa en la cara,

Cada vez que les dejaba algo, solo podia esperar y ellos siempre estaban “demasiado ocupados para contactario. Se disculpaban educadamente y aseguraban que pronto se encargarían

Después de asegurar que alguien se ocuparía del asunto, no era fácil insistir. Pero cuando volvia a preguntar unos días después, se mostraban sorprendidos de que no se hubiera resuelto aún y decían que iban a investigar. Al final, los subordinados también estaban ocupados y se olvidaban de las tareas, lo cual llevaba a más disculpas y promesas. Asi, dando vueltas, la oportunidad se enfriaba,

Por eso Fabio prefería no pedirle favores a Dorian, especialmente en asuntos importantes.

Preferia tratar con Eduardo y Cintia,

Ambos se preocupaban mucho por su imagen, quizás para no avergonzarse frente a sus parientes menos afortunados y demostrar que su familia era capaz de manejar bien las cosas. Siempre que les pedia ayuda, solian hacer todo fo posible por él.

Por eso, Fabio preferia tratar directamente con ellos, pero nunca imaginó que precisamente en este momento criticol Eduardo sufriria una hemorragia cerebral tan grave. No era el momento de irrumpir.

Pero tampoco podía esperar indefinidamente.

Después de varios dias de ansiedad, intentó visitar a Eduardo dos veces más, pero ambas terminaron igual que la primera: apenas salia del ascensor los guardaespaldas de Eduardo lo detenian, diciendo que no estaba bien para recibir visitas, luego lo despedian cortésmente.

Fabio estaba desesperado y para colmo, el Grupo Sabin anunció la lista de los que tenían las calificaciones para competir en la licitación y su empresa no estaba incluida.

Al recibir la noticia, no pudo quedarse sentado sin hacer nada. Decidió llamar a Dorian sin importar si podía confiar en

él o no.

Pero la llamada fue desviada a Yael, uno de sus subordinados.

“El Sr. Ferrer está en una reunión, ¿puedo ayudarle en algo, Sr. Soto?”

Yael era tan irritantemente cortés y sonriente como siempre.

Fabio no disfrutaba tratar con Yael, pero tampoco podia encontrarle la falla, asi que mantuvo la cortesia y le dijo: “Necesito hablar con mi cuñado. ¿Sabes cuando terminará su reunión?”

“Eso es dificil de decir, respondió el asistente con su habitual cortesia. “La reunión es importante y probablemente no pueda salir pronto. Si me dice su asunto, puedo pasarle el mensaje.”

Fabio frunció el ceño con frustración: “Solo dile a mi cuñado que quiero invitarlo a cenar esta noche, a las siete, en Mesa De Oro”

“El Sr. Ferrer está de viaje en la capital y probablemente no pueda. Pero déjame pasarle el mensaje y cuando vuelva de su viaje, si tiene tiempo, él te buscara,”

Fabio se sorprendió: “¿Mi cuñado está de viaje? ¿Desde cuándo? ¿Cuándo vuelve?”

“Acaba de irse hoy.” Dijo Yael, era la verdad, Dorian realmente se habia ido de viaje con él ese día.

17-23

“Toda no estamos seguros de cuando podemos volver” Yael agrego

Fabio runcit el celo con sedad

funció celo con armadad

Tema que para cuando Dorian regresara del viaje, la licitac ya habria terminado

“Entonces voy a revisar de novo gracias & Yael

Fabio colgó el telefono solo un suspiro largo y lanzó el celular casualmente al sofá, apoyó las manos detrás de su cabeza y se recosto en el mirando fiamente al techo con preocupación.

Su padre Fausto salió del cuarto, se habia puesto ropa nueva parecia que iba a salir

“Voy a saleun rato, dile a tu mamá que no se moleste en hacer micona”

Fausto estaba dando instrucciones mientras se dirigia a la puerta para ponerse los zapatos.

Fabio echó un vistaza, notando que incluso se habia puesto zapatos de vestir

Le preguntó con cunosidad “A dónde vas?

Desde su accidente, Fausta habia estado descansando en casa, ya no tenia fuerzas para seguir con su trabajo de construcción y se quedaba alli, saliendo solo de vez en cuando a caminar por el parque.

Esta era la primera vez que salia tan formalmente.

“Voy a comer con tu hermana Amelia, y de paso a ver a sua Dijo su padre, luego se volvió especialmente para recordarle a Fabio, “no le digas a tu mama para evitar que haga un escandalo.

“Amelia?” Fabio se levanto de un salto, emocionado. “Vas a comer con Amelia?

Fausto se sobresalto con su entusiasmo inesperado “Que estas haciendo?

“Voy contigo.“Dijo Fabio levantandose para cambiar de ropa. “Espérame un momento”

Fausto estaba preocupado “Para que vas a ir tu tambien ?”

“¿Qué voy a hacer? Solo voy a comer con mi hermana Fabio buscaba su ropa y giro la cabeza hacia Fausto diciendo, “Papa, ¿puedes dejar de sobresaltarte? ¿Cuando he hecho vo algo malo contra Amelia?

Su padre reflexiono y vio que tenia razon.

Fabio había empezado a salir con chicas desde joven y no prestaba mucha atención a su hermana, lo cual no era gran cosa para el, ¿qué hermano no era así?

A pesar de que en su niñez habia resentido la llegada de una hermana que compartia el amor de sus padres y no dejaba de molestarla, dejo de hacerlo una vez maduro, especialmente despues de empezar a salir con chicas, ya que estaba totalmente concentrado en sus relaciones.

Fausto esperaba que Fabio y Amelia pudieran llevarse bien como cualquier otro par de hermanos, al fin y al cabo, eran familia. Como padre, naturalmente deseaba que sus hijos tuvieran una relación armoniosa y se apoyaran mutuamente. Asi que asintió y le apuro: “Entonces date prsa, te espero.”

“Está bien.” Respondió su hijo impacientemente y ya había cerrado la puerta de su habitación con un “bang“. No pasó mucho tiempo antes de que saliera vestido apropiadamente

Fausto lo examino y se sintió reconfortado al ver que se habia arreglado mucho para ver a Amelia.

“Tu hermana ha tenido una vida dificil desde pequeña, se bueno con ella” No pudo evitar aconsejar a Fabio, “Ella es tu única hermana y tú eres su único hermano, Si tú no la cuidas, ¿quién más lo hará?

“¿Qué dificultades podria tener ella?” Fabio replicó con poco interés, “Nunca le faltó de nada en casa, a pesar de ser tan pobres, mamá y tú se esforzaron para que ella terminara la universidad. Ella ingresó a una secundaria prestigiosa y tú ni lo pensaste dos veces para apoyarla, cuántas chicas como ella simplemente terminan trabajando en fábricas o casándose joven. Si no fuera porque insististe en enviarla a esa secundaria, ella nunca habría tenido la suerte de casarse con Dorian.”

“Eso es porque ella se esforzo, sacó buenas notas y la escuela estaba dispuesta a ofrecerle la beca y el apoyo financiero para que fuera. Por supuesto, tuvimos que dejarla ir” Fausto se emocionó recordándolo, “Además, gracias a

que es estudiosa y tiene éxito, pudo contribuir con dinero para comprar la casa antes de graduarse de la universidad Si no fuera por eso, cuando Beatriz y tu se casaron, sin un peso y sin nada, no habrian estado tan cómodos podido darse el lujo de tener a mi niets. Hay que saber estar agradecidos y satisfechos en la vida”

“Eso es porque primero hubo causa para que después hubiera efecto Sin ustedes, no estaria donde está ahora Fabio miró su reloj impaciente, “Vámonos”

Fausto sacudió la cabeza resignado y salió de la casa con su hijo.

Ese día Fausto había llamado a Amelia para acordar una comida juntos

Amelia resultó tener tiempo libre, así que aceptó encontrarse para compartir una comida afuera.

Originalmente, Fausto había pensado en pedirle a Amelia que llevara a su nieta a su nueva casa para familiarizarse con ella, ya que desde que se mudaron ella no habla vuelto. Pero recordando que cada vez que Blanca vela a Amelia, armaba un alboroto, decidió dejar de lado la idea y optó por un encuentro en un restaurante

Cuando Fabio y él llegaron al lugar, Amelia ya estaba alli, esperando en la mesa con Serena.

Fabio se quedó afuera estacionando el carro y Fausto entró primero al restaurante. Al llegar, inmediatamente vio a Amelia y a Serena sentadas en la mesa

Ella estaba jugando un pequeño juego con su hija,

Al ver a la pequeña Serena, tan bien portada y parecida a Amelia, Fausto sintió una punzada de emoción y afecto.

Aunque ya sabía que Amelia tenia una hija, verlas juntas era un recordatorio conmovedor y le llenó el corazón de un dulce pesar.

Amelia también notó a Fausto y se puso de pie.

“Papa” lo llamó y al ver sus ojos humedecidos mirando a Serena, le presentó en voz baja, “Esta es mi hija, Serena.”

Luego le dijo a Serena. “Cariño, dile abuelito,”

Serena miró curiosamente a Fausto y lo llamó con timidez “abuelito“.

“Ay, Fausto respondió con la voz quebrada, “Serena es muy buena.”

“Papa, siéntate, invitó Amelia,

Fausto recordó que Fabio estaba afuera estacionando y que no había mencionado su presencia a Amelia

“Ah, tu hermano también vino,” dijo rápidamente.

Amelia se detuvo en seco

Justo en ese momento, Fabio entró desde afuera.

“Amelia,” la saludó con un gesto.

Amelia miró a Fausto: “Papa, no habiamos dicho que solo vendrias tú?”

El hombre se sintió un poco incómodo: “Tu hermano queria venir, pensé que como son hermanos, estaria bien que la familia se reuniera para comer.”

“Claro, es solo una comida, no hay por qué ponerse nerviosa,” se quejó Fabio, arrastró una silla para sentarse y luego miro a Amelia, “¿Acaso voy a devorarte?”

Amelia cerró los labios sin decir una palabra.

Fabio tomó el menú con familiaridad, ordenó varios platillos y después de dejar el menú, se dirigió a Serena: “Pequeña, ¿recuerdas a tu tio? Dime tio.”

Serena parecia un poco asustada y se acercó a Amelia.

Amelia tuvo que tranquilizarla en voz baja: “No tengas miedo, él es tu tio.”

Con dudas, Serena miró a Amelia y luego a Fabio, llamándolo con timidez: “Tio.”

“¡Qué buena niña!” Fabio la elogio y sacó un regalo de su bolsillo, “Mira, tu tio te tiene un regalo.”

Serena no se animó a tomarlo, pero aun asi agradeció con timidez: “Gracias, tio.”

Amelia empujó el regalo de vuelta hacia él: “Guárdalo, ella no lo necesita.”

“Es para la niña, no para ti. ¿Desde cuando no se le da un regalo a un niño cuando se conoce por primera vez?”

Fabio insistió y se puso de pie para poner el regalo en las manos de Serena.

Con incertidumbre, Serena miró a su madre.

Amelia tuve que sonreirle y le susurró: “Gracias, pero no podemos aceptar tu regalo.”

Dicho eso, empujó el regalo nuevamente hacia Fabio.

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