Capítulo 228
Hace años que trabajaba por cuenta propia y ya estaba acostumbrada a ver todo tipo de personas y a leer sus expresiones faciales. El único contacto que tuvo con ese hombre importante fue apenas echarle un vistazo desde lejos en su ceremonia de inauguración.
¡Ni siquiera habian cruzado una palabra!
¿Cuando lo había molestado ella?
Entonces, ¿David era el novio de Selena?
Petrona miró a Selena de reojo y Selena sonrió un poco tensa.
Selena también habia notado esa atmósfera extraña desde hace un rato.
Y por supuesto, sabia la razón.
Petrona le guiñó un ojo a Selena, como preguntando qué está pasando?”
Selena la miró y pestañeo, sus ojos llenos de impotencia.
David había visto todas las miradas entre Petrona y Selena, sus ojos se entrecerraron ligeramente.
Levantó la cabeza y vio a Selena con indiferencia.
Selena levantó los ojos hacia él y captó el significado profundo en su mirada.
Después de eso, David no dijo nada, simplemente caminó hacia ella y se sentó a su lado, con un brazo alrededor de sus hombros de manera posesiva y
cercana…
Selena cerró los ojos por un momento y su sonrisa comenzó a desvanecerse.
Solo estaban cenando, ¿qué necesidad había de hacer esto?
La mano de Petrona tembló ligeramente mientras sostenía su vaso de agua.
¿Qué estaba tratando de demostrarle este hombre?
Hola, soy David, el novio de Selena.”
Las sienes de Petrona latían, “¿podrías dejar de mencionar que eres el novio?”
Aun así, le sonrió a David, “Hola, soy Petrona, ¡Selena es mi mejor amiga!”
Hubo un silencio de un par de segundos en el cuarto, David y Petrona se vieron en silencio y luego apartaron la mirada.
“Gracias por cuidar de Selena todos estos años, si necesitas algo en el futuro, no dudes en pedirlo.”
Petrona levantó una ceja, echó un vistazo significativo a Selena y asintió con la cabeza, “Gracias, Sr. Harper.”
Selena, sintiendo la extraña atmósfera, tomó el menú del centro de la mesa y dijo, “¿No tienen hambre? Vamos a pedir, ¿qué quieren comer?”
David sonrió a Selena y le dio un beso en la mejilla.
“Comeré lo que pidas.”
No importaba cuán educada fuera, no podía soportar que alguien le restregara su relación amorosa en la cara. Especialmente porque ahora estaba soltera y lo peor de todo, enamorada sin ser correspondida.
Petrona fulminó con la mirada a Selena, agarró el menú y lo abrió frente a ella.
¿Querían darle de comer comida de perro?
Bueno, entonces ella comería la más lujosa y cara.
Abrió la página de los platos principales y los pidió todos.
Selena la vio sorprendida, dándose cuenta de que Petrona estaba un poco emocional esa noche.
Sin decir nada más, vio a David, quien no mostraba ninguna emoción y luego volvió a mirar el menú.
“¿No te gusta el marisco? Los camarones árticos aquí son muy buenos, ¿quieres pedir algunos?”
Los ojos de David brillaron y su voz profunda se volvió especialmente suave, asintió con la cabeza, “Está bien.” Luego levantó la cabeza, vio a Petrona del otro lado de la mesa y mostró su elegancia y nobleza.
“Pide lo que quieras, Petrona, no te cortes.”
La cara de Petrona no mostraba ninguna emoción, su sonrisa era educada, pero en su corazón se reía fríamente.
¿Cuál era el propósito de esta exhibición?