Capítulo 1696
Selena rio internamnente, miró a Elena y luego a Lila.
“Creo que mi regalo es mejor que el tuyo.”
Al escuchar eso, Lila se rio con desdén.
“¿No es simplemente una joya cara al igual que las nuestras? ¿Cuál es la diferencia?”
“Lila.”
“¿Acaso tu caja es la que es especial? ¿Para qué necesitas una caja tan grande para una simple joya?”
“¡Lila!”
“¿Acaso crees que mientras más grande sea la caja, más impresionante será el regalo? Qué ridiculo.”
*Lila!!”
Lila ignoró las advertencias de Elena hasta que finalmente, la paciencia de Elena se agotó y gritó.
El lugar quedó en silencio.
Todos miraron sorprendidos a Elena, nunca imaginaron que la siempre tranquila y generosa Princesa Elena podría perder los estribos.
Al darse cuenta de su error, Elena se puso pálida, mientras que Lila parecia estar a punto de decir algo, pero no pudo.
Selena sonrió con ironía y puso la caja en la mesa de regalos.
Fina se acercó curiosa.
“¿Qué es este regalo tan especial?”
Selena se inclinó, siguiendo las instrucciones que David le había dado antes y colocó la caja con los agujeros hacia Fina, luego levantó la tapa.
Sino se equivocaba, el regalo de David deberia ser…
Los agujeros en la caja eran del tamaño de un puño y todos los ojos estaban puestos en la caja sobre la mesa.
Pero después de un rato, nada paso.
“¿Qué es esto? ¿No se suponía que era una joya? ¿Por qué solo abre la caja a la mitad?”
“¿Acaso piensas que la joya va a volar fuera de la caja por su cuenta?
“Quizás su intención era solo regalar la caja.”
Los murmullos y risas llenaron el lugar.
Fina se agachó para mirar la caja durante un rato, pero no pudo entender qué estaba pasando. Miró a Selena con duda.
“¿No me digas que solo me regalaste una caja?”
Selena confiaba en David, pero en ese momento, estaba un poco nerviosa.
David habia conducido de manera muy agresiva antes y ella no podía evitar preocuparse si el regalo en la caja se habia dañado.
Pero decidió seguir adelante sin decir nada, sonrió levemente y golpeó suavemente la parte trasera de la caja.
“¿Acaso será un truco de magia?”
Lila estaba decidida a reirse de Selena, a pesar de su metida de pata de antes.
“¿Debería adivinar qué saldrá de la caja? ¿Quizás un pastel de cumpleaños que hiciste tú misma?”
Elena sonrió mirando la espalda de Selena, disfrutando de la situación.
“Selena, ¿quizás necesitas más tiempo para prepararte? Podemos esperar si es necesario.”
Ella no respondió, pero en ese momento sintió un ligero temblor en la caja
Y entonces, algo pequeño comenzó a salir de la caja.
Fina fue la primera en abrir los ojos de par en par, con la boca abierta, mirando fijamente a la criatura. Primero salió la cabeza, luego las patas delanteras, después las traseras y finalmente una cola peluda. Cuando la última pata salió, la criatura tropezo con el borde de la caja y rodo sobre la mesa.
Y luego se escuchó un tierno “miau“.
Era un adorable gatito blanco con pelo largo, con unos ojos tan grandes que podrian derretir a cualquiera. Especialmente después de ese tiemno maullido, que conquistó el corazón de todos.
un gatito muy, muy pequeño.
15.08
La suave pelusa blanca salpicada ocasionalmente con un mechón de gris, la punta de su cola también gris, como si alguien la hubiese rociado a propósito.
Se revolcó un poco y se levantó con esfuerzo sobre la mesa, camino despreocupadamente hasta el borde, viendo la gran distancia hasta el suelo, se asustó y decidió no saltar.
Fina lo observaba, sus ojos no parpadeaban.
Después de un rato, extendió su mano con cautela, sosteniendo al gatito con cuidado y lo acercó para examinarlo más de cerca.
“Miau.” El gatito la miró, quizá por miedo o por querer caerle bien, abrió la boca y maulló de nuevo.
“Aw.”
Fina quedó completamente derretida, temerosa de asustar al gatito, su rostro reprimió mucho su emoción.
Besó al gatito como loca, sus mejillas frotándose contra él
“Qué lindo, qué lindo, que lindo.”
Los ojos de Selena también estaban clavados en el gatito, viendo a Fina tan emocionada, giró su mirada hacia el hombre debajo del escenario.
David levantó una ceja, al encontrar su mirada, lo que vio fue una expresión de reproche en el rostro de Selena.
Frunció los labios y cambió su mirada a un lado.
Él lo sabia.
Nadie en la sala esperaba que Selena regalara tal presente.
Para celebrar el cumpleaños de la nieta del Duque Bolaños, todos estaban estrujándose el cerebro para darle algo absolutamente satisfactorio y genuino, tratando de destacar y ganarse el aprecio de la familia Bolaños.
Casas, carros, joyas, incluso antigüedades, todos eran regalos indirectos para alegrar al Duque Bolaños en el cumpleaños de Fina.
Cada año había nuevas ideas, pero siempre eran las mismas.
¿Quién podría imaginar que después de todos estos años de esfuerzo, la persona que no podian complacer se emocionaría tanto por un gato?
Todos miraban al gato en las manos de Fina y no podían negar que, aunque no interactuaban mucho con esos animales, ese gato era
extraordinariamente lindo.
Fina estaba completamente inmersa en su emoción, la gente no podía dejar de maravillarse.
Las caras de Elena y Lila cambiaban constantemente, estaban completamente sorprendidas por ese regalo inesperado.
Cuando Fina terminó de emocionarse y abrazó al gatito con amor, le dio un beso a Selena en la mejilla con una gran sonrisa.
“Gracias, este es el regalo que más me ha gustado.”
Ella esbozó una sonrisa, pero su vista se desvió hacia alguien en el escenario.
Como esperaba, su rostro estaba sombrio, su aura fria.
Sin hacer ningún gesto, volvió a centrar su atención en Fina.
“Me alegra que te guste.”
Fina asintió, acarició la cabeza del gatito, luego levantó la vista y de repente miró a Elena y Lila, preguntando:
“¿Por qué dijeron que el regalo de la princesa era igual al que ustedes prepararon?”