Capítulo 1674
Selena callo
El era el dueño de ese lugar, y los disturbtos no eran inevitables
Si el queria que ocumeran, ocurian Si no queria, no habria manera de que pasara.
Leandro y Anaya murieron en los disturbios de la frontera
Sin importar que tanto lo pensara, todo fue arreglado
Creyó que, acabando con Andrea, su vida finalmente estaria tranquila.
La idea de matar y actuar en consecuencia, era de una persona despiadada.
Pero comparada con David, sintió que todavía le quedaba mucho por aprender.
No había escuchado ni una sola palabra de él.
Pero dos vidas se perdieron solo así.
No trajo el cuerpo de Andrea de vuelta y ahora entendía por qué.
Desde hace tiempo habia pensado en acabar completamente con la familia Alonso,
Tauro encargó a Valerio que ayudara a Lea, la hermana de Andrea, a organizar el funeral de la familia Alonso.
Pocas personas asistieron al funeral.
Kuno se acercó a David, pidió los cuerpos, diciendo que era para darle un cierre a Lea.
Una vez muertos, todo parecía un sueño fugaz, Selena estuvo de acuerdo, así que David no se negó.-
El dia del funeral, Kuno entregó las tres urnas a Lea.
Lea las aceptó con calma, sus ojos aún estaban rojos.
Aunque fueron despiadados, al final todavía existía el vinculo de la familia, lo que la hizo sentirse triste y agraviada.
Nació para girar en torno a Andrea, incluso en la muerte, todo fue por ella.
Kuno extendió la mano para acariciar su cabello, apretó los labios, sin saber qué decir.
Algunas cosas, solo podía guardarlas para sí mismo.
Nunca le diría la verdad.
Lea acomodo las urnas y los presentes en el funeral no pudieron evitar sacudir la cabeza y suspirar.
Al menos se habian recuperado las cenizas.
Después de consolar a Lea, todos se dispersaron.
Ava invitó a Elena al funeral.
Después de todo, todos sabían que eran parientes.
La relación entre Elena y Lea no era muy buena, así que pensó que no hablarían mucho durante todo el proceso.
Pero al final, Elena se quedó a su lado y no se fue.
La gente iba y venía, pero Lea se quedó en la puerta, con una mirada tranquila.
“¿Han venido los de la familia Terrén?” Elena de repente abrió la boca, llena de sarcasmo, “Me refiero a David y esa mujer llamada Selena.” “No tienen por qué venir. Lo que hizo Andrea, fue tan asqueroso que casi mata a la gente, ¿por qué deberían venir a darle el pésame?”
Las palabras de Lea hicieron que Elena se riera aún más, “¿No tienen por qué venir, o no se atreven a venir?”
“¿Qué quieres decir?”
Elena llevaba un abrigo cálido color caqui ese día, con un maquillaje suave y los labios rojos llenos de sarcasmo.
“Andrea fue asesinada por Selena, Leandro y Anaya supuestamente murieron en los disturbios, pero por más caótico que sea ese lugar, no puede haber disturbios todos los días. ¿Qué tan desafortunados tuvieron que ser para llegar allí y encontrarse con los disturbios? Todo esto fue diseñado por ellos. El verdadero objetivo es acabar con la familia Alonso por completo. Lea, puedo entender que no tengas sentimientos por Anaya y Andrea, pero ¿qué pasa con la venganza por tu padre? ¿Vas a dejarlo pasar así nada más?”
Lea se quedó callada por un momento, miró a Elena y de repente se rio.
“No me provoques. Acusando sin pruebas de que hay un enemigo que mató a mi padre, tus intenciones son demasiado obvias. Además, incluso si lo que dices es cierto, ellos se lo buscaron. Nadie sabe mejor que yo qué tipo de personas eran. Quien siembra vientos, recoge tempestades. Si Andrea no hubiera tenido la intención de matar desde el principio, no habria acarreado estás consecuencias. Es solo el karma, además, no tengo poder para vengarme, así que puedes quitarte esa idea de la cabeza.”
Elena entrecerró los ojos lentamente, “Tu familia está destrozada y ni siquiera puedes aceptar tu destino, eres una verdadera inútil.”
Lea pareció indiferente, “Andrea no era una inútil, pero ahora está muerta. La gente debería conocerse a sí misma, pero ella no lo hizo. Estaba constantemente buscando algo que no le pertenecia, merece su final. Te aconsejo que no seas demasiado codiciosa, no vayas a perder lo que ya tienes.”
Lea había asistido a la cena de gala en el país Y con Leandro y Andrea. Las intenciones de Ava y su hija eran casi transparentes a los ojos de todos.
Al igual que Anaya y Andrea, siempre querían acaparar lo que no les pertenecía.
Elena no esperaba que Lea, que parecía tan débil e inútil, pudiera ser tan incisiva con sus palabras. Se quedó sin palabras, completamente sorprendida.
“Que triste para Leandro tener una hija como tú.”
“Él siempre estuvo triste,” replicó Lea, “La heredera que él formó con todo su corazón y alma se convirtió en la persona que empujó a la familia Alonso al abismo y también en la persona que lo mató. Perdió su patrimonio y su vida, ¿quién es más triste que él?”
Elena dejó escapar una risa fría, su rostro ya no podía mantener la calma y decidió irse.
No mucho después de su partida, David y Selena llegaron..
Las palabras de Elena sin duda la habían afectado.
Pero lo que decía también era verdad.
Todo era consecuencia de sus propios actos.
Sin embargo, al ver a David y Selena, se sintió un poco incómoda.
“Están aquí.”
Ya estaba oscuro y el funeral estaba completamente vacío.
Selena se quedó en la puerta y no entró.
En cambio, sacó un documento de su bolso y se lo entregó.
“Estas son las acciones que me pediste que guardara y las que tenía antes. Toma, son de la familia Alonso.”
Lea miró los documentos ante ella, sin saber qué hacer.
“No tengo experiencia en la gestión de empresas, no podré manejarla.”
Selena asintió, “Si hay algo que no entiendes, puedes preguntarme, si confías en mí.”
Lea sonrió, “El Grupo Alonso estuvo en tus manos, ahora me lo das sin condiciones, ¿por qué no confiaría en ti?
Pero ahora realmente no tengo la capacidad de manejar tanto patrimonio. Mi padre nunca me dejó tener contacto con este tipo de cosas. No puedo manejarlo.”
“Ve poco a poco.”
Selena metió los documentos en las manos de Lea.
Luego miró hacia adentro y acarició su mano.
“Cuidate.”
Lea notó que Selena no tenía intención de entrar, asintió y no dijo más.
Había muchas razones por las que Selena no entraba.
Entrar no habría sido su estilo.
No importaban las razones.
Viendo cómo se alejaban, Lea apretó los documentos en su mano.
Al final, la familia Alonso había sobrevivido.
Lea pensó que tal vez eso era lo que Leandro hubiera querido.
Si él no hubiera muerto, el Grupo Alonso tal vez no habría regresado a ellos.
Cuando Selena entró en la casa de la familia Alonso, vio a Elena.
Luego, Lea se sintió un poco incómoda cuando la vio y Selena lo notó de inmediato.
