Capitulo 1356
Vestia elegante, con un aire sofisticado y noble en cada movimiento que hacia
Cada vez que Selena lo vela, podia percibir una profunda astucia y frío en él.
No había ninguna evidencia, solo basándose en su apariencia y carisma, podía darle esa sensación
Si no fuera por David, ella probablemente nunca tendria contacto con ese hombre, mucho meños sorprenderlo en el asunto de Aleo
A pesar de ser un ser casi divino, ahora era odiado hasta los huesos
Era Octavio
Selena sintió que su corazón empezaba a latir más rápido, hasta que Alicia soltó su mano.
Octavio miro indiferente a Selena, y un destello frio apareció en sus ojos, luego dirigió su mirada hacia Alicia.
Cerro la puerta del coche y se acercó
Alicia aún tenia un caramelo en la boca, el dulce caramelo que ahora se volvía amargo.
¿Te gusta seguirme Dijo levantando la vista hacia el, mientras reia sarcasticamente
“¿Por qué no entras” Octavio miró el orfanato
No se molesto con la actitud de Alicia, solo sonrió levemente.
“¿Y eso que te importa?”
Luego de decir esa frase, pasó a su lado, alejándose rápidamente de la entrada del orfanato.
No quena enredarse alli con él, no podia dejar que tuviera ninguna oportunidad de ver a Yago.
Alicia caminaba cada vez más rápido, sentia que Octavio era como un demonio
No habia llegado muy lejos cuando una mano fria agarro su muñeca
Su corazon latia más rápido, cuando miró hacia atrás vio la alta figura de Octavio acercándose.
“Sueltame Alicia se revolvió, su voz temblaba ligeramente
Los ojos del hombre estaban entrecerrados mientras miraba la muñeca de su exesposa que se habia puesto roja por el esfuerzo.
“¿Por qué estás huyendo?”
Su voz profunda resono en el oido de Alicia.
Levantó la cabeza, sus ojos profundos llevaban la sabiduria y la curiosidad que ella conocía y temia.
Luego paso su pulgar ligeramente por la muñeca de Alicia. La esquina de su boca se curvo en una sonrisa, incluso sus ojos llevaban una sonrisa, luego volvió a hablar Estas tan ansiosa por inte porque has hecho algo que no quieres que yo sepa?”
Selena se quedo donde estaba, y al oir eso se puso nerviosa. Observaba a Alicia con intensidad, temiendo que perdiera el control por las palabras que acababa de
escuchar
Enfrente de alguien como Octavio, incluso el más minimo error podría tener consecuencias inimaginables.
Sin embargo, después de un momento de silencio, se rio suavemente, y lo miro
¿Crees que hay algo que me asustaria que supieras? ¿Acaso voy a cometer un crimen y ser enviada a la cárcel? He vivido en ese lugar casi tres años, como si fuera mi hogar, aun si vuelvo, no me asusta. Dime… que podria asustarme que supieras?‘
Mordio y trago el dulce que tenia en la boca.
Octavio tenia una sonrisa fría en el rostro, sus mejillas se enfriaban con el viento, sus ojos estaban llenos de fraldad.
Alicia sonno y dirigió su vista hacia el orfanato.
“Vine aqui cuando sali de la carcel Los niños aqui no tienen hogar. Algunos de ellos han perdido a sus padres, otros han sido abandonados, y hay uno con un solo padre, cuya madre esta en la cárcel
Todos los dias la escucho hablar de su hijo, despierta o dormida. Estoy harta de escucharla. Es joven, ¿por qué no piensa más en ella misma en lugar de siempre pensar en los demás? Es absurdo!”
Octavio miró friamente a Alicia
Recordando la noticia de que Selena estaba embarazada que recibió anoche, un pensamiento surgió en su mente su mano que agarraba la muñeca de Alicia se apretó involuntariamente
¿Los niños son otros para ti?”
La mujer apretó los dientes con fuerza, conteniendo la amargura en su garganta, y continuó: “Los niños solo son una carga. ¿Qué más hacen aparte de obtener lo que necesitan de los padres e incluso de otros? Hoy es un raro dia libre, sall a relajarme, no a buscar problemas. Ver a esos niños me molesta. Verte a time
molesta aún más…”
Pero no era asi
Alicia había ido a ver a Yago, el no era una carga. Era su jodol
¡Él nunca se había aprovechado de ella, nunca!
Desde que el nació, nunca habia cumplido con su deber como madre. Nunca lo habla abrazado, nunca le habla dado de comet, nunca lo habia protegido adecuadamente
Al contrano, fue él quien le devolvió las ganas de vivir en la cárcel, quien le dio un objetivo, una razón pas seguir adelante.
Yago le dio una nueva vida, le dio una segunda oportunidad, la hizo madre.
Las palabras forzadas fluyeron con naturalidad desde la boca de Alicia, llenas de sinceridad y furia.
Pero cada palabra, cada frase, era como una hoja afilada que le cortaba el corazón hasta hacerla sangrar.
¿Quién era ella para decir esas tonterías?
Selena la miraba desde lejos, sintiéndose fria por dentro.
¿Una carga? ¿Cómo es posible?
¿Murmurando despierta, murmurando dormida?
¿A quién se refiere Alicia? ¿Por qué se está lastimando de esa manera?
“Eres verdaderamente despiadada.”
Octavio la miró friamente, sin soltar su brazo
Ella le sonrio, sus ojos estaban llenos de sarcasmo, “Si, soy fria, perdi la compasión hace mucho tiempo”
Hasta hace un momento, había una falsa expresión en el rostro de Octavio, pero ahora, habia desaparecido por completo.
Pasó un buen rato, luego una sonrisa apareció en la esquina de su boca, solo que esa sonrisa era más fría que su cara sin expresión.
*¿Donde está tu compasión?”
Alicia se quedó sin aliento por un momento, levantó la vista hacia el rostro frio e insensible del hombre, y se soltó de su agarre
Esta vez No esperaba tener éxito, estaba a punto de darse la vuelta y marcharse
De repente, alguien agarro su hombro con fuerza, y con un tirón, su cuerpo fue obligado a girar y fue presionado contra el lujoso coche negro detrás de ella.
El atractivo rostro de Octavio se acercó