Capítulo 302
En un abrir y cerrar de ojos, los camareros habian traido el bistec.
Desde que Rafael se sento, no habia dicho nada, pero en comparación con las dos veces anteriores, de vez en cuando echaba una mirada de reojo hacia ella.
Con más gente en la mesa. Violeta tampoco hablaba mucho, solo cortaba la carne en su plato en silencio
Solo Catalina disfrutaba de la comida con gusto.
Después de comer, Rafael llamó al camarero para pagar la cuenta, Catalina le guiñó un ojo a Violeta, “¡Qué bien, un caballero va a pagar la cuenta de estas dos damiselas!”
Violeta solo pudo reirse torpemente en respuesta.
Finalmente terminaron de comer, ella estaba a punto de irse, pero Catalina la agarró del brazo.
“Violeta, has bebido bastante vino, tengo que llevarte a casa, ¡no confío en que vuelvas sola!” Dijo Catalina, luego giró su vista a su sobrino, “Rafael, ipodemos usar tu coche!”
Rafael respondió con un murmullo casi inaudible.
Violeta no tuvo oportunidad de rechazarlos, y fue arrastrada al coche por Catalina sin más
El Bentley negro se deslizaba por la noche, el conductor conducía de manera estable en dirección al apartamento junto al rio
La ventana estaba medio abierta, y el fresco viento nocturno soplaba adentro, se sentía muy agradable. Catalina se recostó perezosamente en el asiento del coche, sonriéndole y preguntándole, “¿Estás llena?”
“Eh, si, estoy llena… Violeta asintió.
En serio? ¡Yo no estoy llena!” Catalina frunció el ceño al oír eso.
Violeta opto por mantenerse en silencio.
Porque cuando pagaron la cuenta, todavía quedaba bastante carne en los platos de ella y Rafael, pero el de Catalina estaba completamente vacío, incluso la guarnición alrededor del plato habia desaparecido.
Creo que este chef es mediocre, tengo que darle un par de malas críticas por internet cuando llegue a casa! Después de decir eso, Catalina le lanzo una mirada sonriente y bufo, ¡Violeta, todavia creo que el arroz con pollo que haces es mucho más delicioso! ¿Cuando puedo probarlo de nuevo?”
Violeta sonrió, Tia, puedes comerlo cuando quieras…”
Cuando llamó a Catalina, Rafael, que estaba sentado en el asiento delantero, se giro para mirarla
En el carro donde las luces de neon pasaban rápidamente, sus ojos profundos y reservados estaban. ligeramente entrecerrados.
Sus miradas se cruzaron, y Violeta fue la primera en apartar la vista
“¡Buena chica1” Catalina la aplaudió, estaba satisfecha.
Después de un rato, Catalina pareció recordar algo y le preguntó, ¿Creo que escuché que Nono se lleva muy bien contigo?”
Violeta miro instintivamente al copiloto delantero
Esta vez, Rafael no se volvió, pero en el espejo retrovisor, podia ver que sus ojos eran tan profundos como un pozo antiguo, ella respondió con cuidado, ‘Nos llevamos bastante bien…”
¡Ayer cuando baje del avión para verlo, no paraba de balbucear “Vivi, Vivi”! ¡Casi me salen ampollas en los oidos de tanto escucharlo!’ Después de decir eso, Catalina exagero un poco y se tocó las orejas.
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Capitulo 302
Aunque Violeta no pudo verlo, podia imaginar lo tierno y lindo que sería el pequeño Nono al balbucear su
nombre.
No pudo evitar suavizar su expresion, y asintió, “Nono es muy encantador.”
Cuando decia esto, Violeta le echó un vistazo al espejo retrovisor, pensando que al escuchar a alguien elogiar a su hijo, cualquier padre se sentiria orgulloso Esperaba ver sus cejas levantadas, pero en cambio, vio su ceño
fruncido
Catalina también estaba observando cuidadosamente su expresión, y después de escuchar lo que dijo, no pudo evitar sonreir.
“Parece que todos en nuestra familia tenemos buen gusto.” La sonrisa de Catalina se hizo más grande.
Sin embargo, después de decir eso, añadió silenciosamente en su mente, excepto mi hermano Sebastián.
Violeta se sintio incomoda.
Porque cuando Catalina hablaba, miraba deliberadamente hacia adelante, afortunadamente, el coche comenzo a desacelerar, ya habían entrado al complejo residencial, y pronto se detuvieron frente all apartamento, sintiéndose aliviada, “Eh, llegamos!”
Una vez que el Bentley se estacionó, el conductor bajó del carro y abrió la puerta para ellas. Catalina fue la primera en bajar, seguida por Violeta, quien, distraida, no notó el brillo en los ojos de Catalina y la pierna que se extendia silenciosamente hacia ella. Antes de que Violeta pudiera mantener el equilibrio, tropezó.
Por la posición en la que se encontraba, cayó directamente en los brazos de Rafael, quien acababa de salir del asiento del copiloto Casi al mismo tiempo, Rafael la abrazó firmemente Violeta se apoyo en su pecho, sintiendo el calor de su cuerpo. Se sonrojó hasta el cuello, se levantó rápidamente y dio un par de pasos hacia un lado Emm, disculpa, gracias..
“Ay. ¿Violeta, estás bien? ¡No me di cuenta y tropecé contigo! Catalina exclamó en ese momento.
“Estoy bien… Violeta sacudió la cabeza avergonzada, le echó un rápido vistazo a Rafael, luego a Catalina, y dijo con angustia, Tia, gracias por traerme a casa, voy a subir…”
¡Espera un momento! Catalina de repente la detuvo, y continuó, Rafael, Violeta ha bebido mucho vino, parece que no está un poco mareada, y ya es muy tarde, ¿podrías acompañarla a su departamento?”
Violeta no estaba borracha, solo había tomado una copa antes de que llegara Rafael. Aunque el vino tinto suele tener un efecto retardado, no sentia ningún mareo. Queria decir que no era necesario, pero Rafael se
adelantó a ella. “Ok, la llevare.”
Con las manos en los bolsillos, la alta figura de Rafael comenzó a moverse hacia el edificio de apartamentos Violeta no tuvo más remedio que seguirlo silenciosamente.
Desde atrás, la voz de Catalina continuo, ¡Asegúrate de verla entrar antes de irte, no tengas prisa! ¡Ay yo también he bebido un poco, voy a dar un paseo y tomar aire fresco!”
Violeta sospechaba que Catalina lo había hecho a propósito si no fuera por su genuina preocupación por ella.
Una vez que entraron al edificio, el ascensor estaba convenientemente en el primer piso. Subieron rápidamente después de presionar el botón del piso.
Rafael miraba hacia abajo con una expresión pensativa en su rostro.
Ding!”
Cuando llegaron a su piso, salieron del ascensor uno después del otro.
Esta vez Violeta iba adelante. Cuando llegó a la puerta de su apartamento, sacó sus llaves y abrió la puerta. Las luces del interior ya iluminaban el apartamento; Marisol ya debía haber llegado a casa pero no estaba en la sala de estar La puerta de su habitación estaba cerrada, y se podía oir el sonido de una telenovela.
“Ya llegué
Violeta sacó la llave, se volteó hacia el y le dijo.
Al ver que el permanecia en silencio, frunció el ceño, y luego dijo en voz baja, “Bueno, voy a entrar, gracias..”
Estaba a punto de cerrar la puerta, pero solo logro cerrarla a la mitad antes de que se atascara. Frunció el ceno, miró hacia abajo y vio el zapato derecho de Rafael bloqueando la puerta.
Tu…? Violeta tuvo que levantar la vista
Rafael, con la cara en sombras, la miro fijamente “Violeta, no dijiste que no nos conocíamos?”
