Capítulo 992
“¿Me invitas a comer?” Elia pensó que había escuchado mal y preguntó a cambio.
“Si, mi esposa sabe que eres mi hija, antes fue muy mala contigo y con tu madre, armé un escándalo para divorciarme de ella y ahora se arrepiente. Quiere invitarte a comer para pedirte disculpas y aceptarte como mi hija“, dijo Gabriel, enfatizando la palabra “hija“.
Era un recordatorio para Elia, que su identidad como su hija ahora era reconocida por todos.
“¿Qué tengo yo que ver con tus problemas de matrimonio?” Elia respondió con desdén. Si no fuera porque Gabriel era tan ruin y temía que publicara el video en línea, ni siquiera le contestaría el teléfono.
“¿No quieres venir a comer?” La voz hipócrita de Gabriel se volvió fría al preguntar de nuevo.
“¿Por qué tendria que ir a comer? Elia contenía su furia y su aversión.
“Mira, anoche no regresé a casa, mi esposa estaba verificando dónde estaba y le dije que estaba contigo, que eres mi hija, ¿qué te podria hacer? No me cree y quiere que vengas a comer para preguntarte si estuvimos juntos anoche“, dijo Gabriel con una voz fría y sin adornos.
Elia sintió un nudo en el pecho, tan doloroso que casi no podia respirar.
Temblaba de odio, apretó el teléfono con fuerza, y se tensó con rabia.g2
¡Gabriel todavía se atrevia a mencionar lo de anoche!
¿No sabía él mismo cuán repugnante y carente de moral era?
¿No estaba claro lo que había intentado hacerle ayer?
¡Y todavía se escondia detrás de su identidad como su hija para engañar a su esposa y limpiar su propia sospecha!
Elia no dijo nada, su respiración se agitaba con furia, apretando los dientes para evitar explotar con insultos.
“Ahora es un buen momento para venir a almorzar, te enviaré la dirección. Espero verte en una hora, de lo contrario, lo que enviaré será otra cosa“, la voz desagradable de Gabriel sonó de nuevo, siempre con
amenazas
Después de hablar, colgó el teléfono.
No temia que Elia no viniera, le habia dado suficiente tiempo.
Elia respiraba con dificultad, frunció el ceño y apretó el teléfono con fuerza, deseando poder destrozarlo en ese
mismo instante
Pero se contuvo de su impulso de romper el teléfono.
El culpable era Gabriel, no el teléfono El que merecia morir era él!
¿Ir a la casa de Gabriel a comer? Ella al final decidió ir
Justo estaba buscando una oportunidad para obtener la dirección IP de la red de la casa de Gabriel.
Elia condujo el mismo coche negro que habla usado esa mañana para llevar a los niños a la escuela, siguiendo el GPS
Media hora después, llegó a la casa de Gabriel
¡Vivian en una mansión!
Tener una mansión en la Capital seguramente costaba mucho dinero
Gabriel era solo un trabajador de oficina, con ese salario no podria comprar una mansión en la Capital ni trabajando durante toda su vida
Capitulo 992
¿De dónde venía todo ese dinero? Si no era engañando a las ricas herederas que engatusaba
Elia se esforzaba por ocultar el profundo desprecio en sus ojos.
“¡Ay, Elia, llegaste, por favor pasa Adela salió al encuentro con una sonrisa al ver a Elia
Elia vio su sonrisa sarcastica y sintió que era falsa
Adela se acercó a Elia miró el coche detrás de ella y dijo Ay pero si es un Lamborghini, qué carrazo, muy
elegante!
Liuva estaba de pie en la puerta, con los brazos cruzados y una actitud arrogante y despectiva resoptó y di “¿Elegante? Si es el coche de Asier Ella solo brilla por su relación con Asier, sin él, ella no es nada”
