Switch Mode

¡Domesticame! Mi pequeña y gran Elia 964

Capitulo 964

Capítulo 964

Dentro de la sala privada de lujo.

El hombre regordete, con el rostro distorsionado por el dolor, sabia que si sequia resistiéndose, el guardaespaldas aumentaria aun más la presión y le romperia las muñecas, era un dolor insoportable

“Hoy hoy recibi un dinero y secuestré a una chica, la lleve a una casita en Monte Plano, pero después mi jefe mando a otro tipo y le entregue a Elia Luego, baje de la montaña y ya no supe más a dónde la llevaron.” Confeso apresuradamente el hombre regordete

¿Quién es tu jefe y a quien se la entregaste?” preguntó el guardaespaldas con severidad

“Mi jefe es Felipe. El hombre que vino después de mi, no lo conozco, solo sé que parecia un poco intelectual, de

esos que se creen mucho.”

“¡No te atrevas a ocultarnos nada!” El guardaespaldas, furioso, apretó más la muñeca que sostenía

El hombre robusto, aterrado, exclamó No estoy mintiendo, te lo juro por lo más sagrado, ay!”

Se escucho un crujido atroz.

Un grito desgarrador broto del hombre, mientras un dolor insoportable emanaba de su muñeca fracturada.g2

Cayo al suelo, retorciéndose de dolor.

Asier, con una mirada gelida y despiadada, ordenó: “¡Llévenselo!”

El guardaespaldas levantó al hombre aún convulsionando y lo arrastró fuera de la vista.

“Nos vas a llevar a donde está Elia. Si no la encontramos, hoy mismo tu vida se acaba aqui, ¿me entendiste?” advirtio el guardaespaldas mientras empujaba al hombre al vehículo

Mientras tanto, Elia fue llevada por Gabriel a un hotel de vacaciones. Era temporada baja y el lugar estaba casi vacio El hotel no estaba muy lejos de la montaña donde había sido secuestrada, asi que un breve viaje en auto los llevó a su destino.

Sus manos permanecian atadas detrás de la espalda, era una clara señal de que habia sido raptada Caminar por el lobby era impensable.

Aunque buscaba la oportunidad de pedir ayuda, Gabriel la guio por una puerta trasera donde alguien ya los esperaba, un viejo conocido de Gabriel, al parecer

“Gabriel, mira lo que has conseguido, una muchachita joven y bonita Sera lo de siempre? ¿Primero tu y luego yo?” dijo el hombre que los esperaba, tenía un aspecto ladino y una mirada lasciva

El corazón de Elia se hundió al oir sus palabras y un escalofrio de repulsion recorrió su cuerpo.

¿Cuantas mujeres habrían caido presa de estos dos hombres? Penso ella

El miedo y el asco la invadian mientras contemplaba el rostro del cómplice de Gabriel

“Vaya, esta niña tiene fuego Me gustan bravas, son mas emocionantes de someter, dijo el hombre de ojos lascivos, intentando tocar el rostro de Elia

Ella trato de evitarlo sin éxito

Gabriel interrumpió bruscamente y dijo, “Jiménez, esta vez es diferente. No te metas en esto. Te transferire doscientos mil ”

Doscientos mil?” Jiménez miró a Gabriel con sorpresa, luego giró su vista hacia Elia

Perder la oportunidad de estar con una mujer tan hermosa era lamentable, pero el dinero también era

tentador

Capitulo 964

“Bueno, por doscientos mil, me quedo fuera. Entra, rápido,” concedió Jiménez, haciéndose a un lado para dejarlos pasar.

Gabriel tiró de Elia hacia el interior y se dirigieron directamente al ascensor

Al abrirse las puertas del ascensor, empujó a Elia hacia dentro.

El terror se apoderó del corazón de Elia. La pesadilla parecia inminente y no sabia cómo escapar

Todo el trayecto estaba meticulosamente preparado por Gabriel, no había visto ni una persona ni un vehiculo

en el camino Incluso en el hotel, solo estaba aquel cómplice y nadie más en el elevador

Queria gritar por ayuda, confiando en que alguien en el hotel la escucharia, pero antes de salir del coche.

Gabriel le sello la boca con cinta adhesiva.

Estaba tan apretada que no podia emitir ningún sonido.

Comment

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Options

not work with dark mode
Reset