Capítulo 773
Diana siempre había tenido ojos para Vicente, buscando la oportunidad de acercarse a él, deseando estar a su lado.
La frase de etta, sin embargo, habla puesto en peligro los intereses de Diana, haciéndola pensar que intentaba robarle a Vicente Fuentes.
Elia dijo con calma: “No te preocupes, los salarios que deben descontarse se descontarán. Solo dije eso ayer para encontrar una salida, para evitar ser el objetivo de todos. El jefe sabe que estaba bromeando, ¿por qué te lo tomas tan en serio?”
Elia le explicó claramente a Diana que trabajaban en la misma oficina y que sería difícil colaborar si existiera algún problema entre ellas, por lo que estaba buscando una mejor convivencia en el futuro.
Diana, que hasta entonces había podido contener sus emociones, ya no pudo soportarlo y le dijo enojada a Elia. “Si no lo tomó en serio, ¿por qué despidió a Saúl tan pronto como llegó esta mañana?”
Elia la miró sorprendida y dijo: “¿Saúl fue despedido?“!
“No finjas no saberlo, a saber lo que dijiste delante de Sr. Fuentes.” Diana la miro de reojo, se giró y comenzó a trabajar, sin querer decir nada más.e2 A pesar de su frustración y resentimiento, no podía hacer nada contra Elia.
¿Quién podría contra las habilidades superiores de Elia?
En solo dos dias, habia logrado expulsar a Susana de la secretaría, y en menos de dos meses, había despedido a Saúl del departamento de compras.
Era evidente que Fuentes estaba defendiéndola.
Y aún decía que no tenía nada que ver con el jefe Fuentes, ¿quién le creería?
Diana en ese momento estaba totalmente convencida de que Elia y Vicente Fuentes tenían una relación clandestina.
Pobre Diana, Había tenido una fijación con el Sr. Fuentes durante tanto tiempo, pero ni siquiera había podido tocar su mano.
Elia, por otro lado, estaba tanto sorprendida como incrédula. No se había esperado que Saúl fuera despedido.
¿Fue idea’de Vicente o de Asier?
Cuando Susana fue despedida anteriormente, fue porque Asier vio que su ropa estaba manchada con té, le preguntó que había pasado y ella simplemente dijo que un compañero de trabajo la había derramado accidentalmente.
Al día siguiente, Susana fue despedida.
Y ayer, Saúl se le declaró, incluso la molesto en la calle, y Asier lo vio…
No podía ser, ¿Asier había hecho que Vicente despidiera a Saúl?
Elia recordó que Asier le había preguntado ayer cómo se sentía siendo perseguida por alguien.
Juntando la fría actitud de Asier hacia Saúl la noche anterior.
Llegó a la conclusión de que Asier debía pensar que Saúl estaba intentando robarle algo que le pertenecía, y quería darle una lección.
El deseo de posesión de Asier era realmente aterrador.
A las once de la mañana.
Vicente llamó a Elia y Diana a su oficina.
Vicente había organizado una pequeña reunión para ellas
“Estos son nuestros documentos de colaboración con Sergio, échenle un vistazo. Elia, ve a la fábrica de electrónicos Serelia en los próximos días para supervisar el progreso de la producción de teléfonos móviles.” Vicente arrojó los dos documentos frente a Elia y Diana, asignando las tareas de trabajo de Elia para los próximos días.
“Sr. Fuentes, ¿y yo?, ¿qué necesito hacer?” Preguntó Diana con expectación.
“Tengo que ir a una reunión fuera de la ciudad en los próximos días, Diana, tú vendrás conmigo, serás responsable de reservar el hotel y organizar el itinerario.” Dijo Vicente.
Al escuchar que podía ir de viaje con Vicente de nuevo, Diana no pudo contener su alegría.
“De acuerdo, Sr. Fuentes. Respondió, mirando victoriosamente a Elia.
Cada vez que Sr. Fuentes viajaba, la llevaba con él, jlo que significaba que todavía tenía una oportunidad! Tenía que aprender de Elia, ser más dulce, y tratar de ganarse a Sr. Fuentes lo antes posible.
Ela no le prestó atención, estaba completamente absorta en los documentos
“¿No es un poco apresurado el tiempo de entrega en una semana?” Elia encontró una cláusula irracional.
“No te preocupes, la fábrica electrónica de Serelia puede cumplir con el cronograma. Con un horario de trabajo de veinticuatro horas sin cesar, la cantidad de trabajo que pueden hacer es tres veces la de otras fábricas“, le respondió Vicente a su duda.
Elia asintió con la cabeza.
Por cierto, Sergio mencionó que vendrá a dejar el anticipo mañana, Elia, tú serás la encargada de atenderlo“, agregó Vicente.
El corazón de Elia se hundió un poco