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¡Domesticame! Mi pequeña y gran Elia 701

Capítulo 701

Ella evito su mirada, buscando cambiar de tema.

Asier, con sus profundos ojos, se fijó en su pie vendado que yacia en la cama.

“Puedes correr por ahi, parece que no te duele.” La voz de Asier era fría y cortante.

Elia se dio cuenta de lo que él insinuaba. Bruno probablemente ya le había devuelto el dinero.

¿Estaba molesto por eso?

Era extraño, se molesto cuando penso que ella se habia quedado con su dinero, pero también se molesto cuando se lo devolvió.

¿Qué tenia que hacer para que el estuviera satisfecho?

Elia respondió con firmeza “Los mil millones no eran para Gabriel. La situación es un poco complicada, pero en resumen, recuperé los mil millones y los tres millones adicionales Los tres millones fue de la venta del broche que Gabriel engañó. Cuando te pregunté por tu cuenta bancaria te molestaste, asi que le transferi el dinero a Bruno, ya lo deposito en la cuenta de la empresa, ¿verdad?”

Era mejor poner las cosas sobre la mesa en ese momento, en lugar de ser torturada por su frialdad.g2

“¿Y luego?” Asier estaba de pie al borde de la cama, con una mirada intensa y afilada, fija en ella. Elia se sentia oprimida, apenas podia respirar

Le respondió “Solo queria decirte que no me alie con Gabriel para estafarte. No tengo nada que ver con él. No necesitas descargar tu odio hacia el sobre mi.”

Sus hermosos ojos acuosos se encontraron con los suyos, llenos de seriedad. Por primera vez, se lo dejó claro delante de él.

El aura alrededor de Asier se volvió repentinamente gélida, con sus ojos oscuros y fríos como el hielo, fijos en los suyos. Su gran mano subitamente apresó su barbilla, y su voz, profunda y helada, resonó como si viniera del mismisimo infierno. “Asi que crees que puedes lavarte las manos de esto. Eres ingenua. Nunca podrás estar al margen, ¿entendiste?” El frio y furioso aliento de Asier golpeó el rostro de Elia y su corazón se lleno de miedo.

Lo que él queria decir era que mientras ella tuviera sangre de Gabriel en sus venas, nunca la dejaria en paz.

“Asier, deberías perdonarte a ti mismo…”

“No, a quien no perdono es a ti. Al enfurecerme, sabes cuál debe ser el precio, su voz sonaba baja y helada, y selló sus labios con un beso

“Mmm… no quiero… Elia fue dominada por él, su beso era dominante y salvaje.

Elia apenas podia respirar

No fue hasta que ella estuvo a punto de asfixiarse que Asier la soltó, su beso dominante se deslizó por su barbilla, bajando por su cuello.

Elia jadeaba con dificultad, su pecho subia y bajaba con fuerza, su beso, dondequiera que fuera, era como encender un fuego en su cuerpo, ardiente y abrasador, y su corazón temblaba

Su mano agarro la ropa de Asier, con voz temblorosa dijo: “No, me lastimare el pie de nuevo…

Ella se inclino hacia atrás, dejando escapar un gemido involuntario

“No estaremos usando los pies.” La respiración de Asier era pesada, rociando su cuello.

Elia se estremeció, sus manos apretaron aún más su espalda.

“Los niños todavía me están esperando…”

Sus palabras eran una súplica

Habia prometido a los niños bajar a cenar con ellos más tarde. Ella sabía muy bien cuánta energía tenía Asier

No seria algo rápido

Asier no pudo ignorar sus palabras y la mordió punitivamente en la oreja.

“Ah!” Elia gritó de dolor

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