Capítulo 508
Asier descubrió el secreto de los niños que Elia guardaba.
Estaba acabadal
Elia estaba hecha un lio.
Corrió a su habitación a la mayor velocidad posible, agarró su mochila, abrió el armario y sacó un poco de ropa para cada uno de ellos.
Nerviosa y agitada, les dijo a los niños. “Mis amores, mamá va a llevarlos de viaje, vengan rápido con mamá!”
Iria, con su carita regordeta, mostró una sonrisa brillante y alegre: “Si, me encanta viajar con mamá!”
Inés también estaba emocionada “Si, si, voy a viajar con mamá, yo cogeré el equipaje“.
Se adelantó para ayudar a Elia con la mochila, pero era demasiado pequeña y a pesar de que quería ayudarla, su pequeño cuerpo no tenía la fuerza suficiente para levantarla, su carita se puso roja por su esfuerzo.
Elia se puso la mochila en su la espalda, entendiendo el deseo de Inés de ayudar y amándola aún más por ello.g2
Pero ahora, no había tiempo para consolarla, tomó su pequeña mjano y les dijo a los otros tres: “Mis amores, nos vamos ahora, muévanse rápido“.
Joel sonrio tiernamente, siguiendo a Elia como una pequeña cola, preguntó: “Mamá, ¿tenemos dinero ahora y ya no tienes que trabajar tanto, así que podemos irnos de viaje?”
Ela no entendió de inmediato a qué se refería Joel con tener dinero, pensó que se refería al dinero de la venta del colgante de esmeralda y el premio que Iria ganó en el concurso culinario.
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Asintió con la cabeza y dijo: “Si, tenemos dinero, vamos a viajar en familia, pero deben moverse más rápido“.
Los llevó fuera de la habitación, pero vio que Rosalinda aún estaba sentada en la mesa, absorta en sus pensamientos.
Le instó con voz apresurada: “Mamá, si no tienes nada que llevar, vamos ahora“.
“¿Por qué estás actuando así? Apenas nos hemos establecido, ¿a dónde vamos ahora?” Rosalinda preguntó con el ceño fruncido.
Elia no tenía tiempo para explicarle, y le dijo con ansiedad: “Mamá, vamos primero, te lo explicaré en el camino“..
“Abuela, ven rápido, vamos de viaje, vamos a jugar en la playa“. Iria se acercó a Rosalinda, tomó su mano y la instó con alegría.
Aunque Rosalinda estaba muy curiosa y confundida, no pudo resistir el encanto de Iria y se levantó para seguirles hacia la puerta.
Elia había recibido una llamada telefónica y después de eso, dijo que tenían que irse.
Rosalinda sabía que estaban huyendo.
¿Qué le había hecho a Asier para tenerle tanto miedo?
Luego recordó que el colgante de esmeralda que Asier le había dado a Elia, ella lo había vendido y el dinero había sido estafado.
Quizás Asier venía a buscarlos para pedirles cuentas sobre eso, para que le devolvieran el dinero.
Por eso Elia, sin otra opción, decidió huir con ellos.
Al pensar en eso, Rosalinda se sintió culpabley cooperó en irse con ellos..
Si hubiera sido cualquier otro día, definitivamente no habría aceptado irse.
Elia llevó a los niños y a Rosalinda a la planta baja y paró un taxi en la calle.
Rápidamente ayudó a los niños y a Rosalinda a subir, y ella se sentó en el asiento del copiloto.
Supuso que Asier estaría en camino a su casa.
Tenía que escapar antes de que Asier llegara.
Por suerte, había dejado el collar en el antiguo apartamento. Asier seguramente irla primero al lugar donde estaba el collar, lo que le daría tiempo para escapar. Una vez en el automóvil y en marcha, Elia todavía se sentía inquieta, incapaz de calmarse.
Nunca había imaginado que un dia tendría que huir con sus hijos, como una fugitiva.
No había hecho nada malo.
Solo quería vivir una vida tranquila y pacífica con sus hijos.
Fuera del antiguo apartamento alquilado.
Asier, con una presencia imponente, se paró en la puerta, tocó dos veces, pero no hubo respuesta.
Pateó la puerta, derribándola, luego entró en la oscuridad del apartamento, sin ninguna luz.
Sus ojos oscuros brillaban en la noche, como los de una bestia.
Encendió la luz con facilidad, iluminando todo el espacio.
