Switch Mode

¡Domesticame! Mi pequeña y gran Elia 424

Capitulo 424

Asier no sabia que ella se habia mudado, seguramente estaría debajo de su antiguo edificio.

Ela acababa de llegar a casa cuando su teléfono sono con una llamada de Asier, poniendo sus nervios en un estado de gran tensión.

“Señor Griera, ya es hora de dormir, ¿podemos hablar por teléfono normal?” Elia intentó ganar un poco de tiempo, preferiria no encontrarse en persona.

Puedo subir o puedes bajar tu decides respondió Asier con una voz fria

Bajare, pero tendrás que esperar un poco, estoy en la ducha, necesito unos treinta minutos.”

Elia estaba nervios y asustada

Si Asier subia, descubriría que ella se había mudado

Solo pensar en eso le daba escalofrios

Lo acababa de enfrentar esa mañana, y si lo enfadaba de nuevo, las consecuencias no serian buenas para ella.g2

Después de hablar, Elia se dio cuenta que Asier habia colgado.

Acababa de poner un pie en casa cuando tuvo que sacarlo y correr hacia las escaleras

Estaba a punto de bajar las escaleras cuando se dio cuenta de que aún llevaba la pulsera que le había regalado Sergio.

Rapidamente se detuvo, como a casa, se quito la pulsera y la guardó en el cajón del zapatero en la entrada.

Luego, salió comendo como si su vida dépendiera de ello

Eran más de las diez de la noche, y su edificio, aunque era antiguo, no estaba en un área muy concurrida. A esta hora, no había muchos autos en la calle

Habia estado esperando una buena cantidad de tiempo sin que ningún auto pasara

Elia sacó su teléfono y vio que ya habian pasado ocho minutos desde que Asier la había llamado. ¿Qué iba a hacer si no pasaba ningún taxi?

Asier no era alguien a quien le gustaba esperar

Si se impacientaba, ella seria la que sufriria las consecuencias.

Afortunadamente, justo cuando comenzaba a desesperarse, apareció un taxi

Lo detuvo, subió y le dio al conductor la dirección de su antiguo edificio, pidiéndole que condujera rápido.

Mientras tanto, Asier estaba sentado en su auto, estacionado debajo del edificio donde Elia solia vivir.

Habia estado esperando durante diez minutos y todavia no habia visto a Elia Sacó su teléfono, abrió una aplicación de rastreo y vio un pequeño punto rojo a un kilómetro de distancia que se movia rápidamente hacia su ubicación

Los ojos de Asier estaban frios y aterradores

La atmosfera alrededor de el era tan fria como una tormenta de nieve en pleno invierno.

Miro fijamente el punto rojo en la pantalla de su teléfono, moviéndose rápidamente hacia el

Elia, por otro lado, le pidió al conductor que la dejara por la puerta trasera del edificio para poder fingir que acababa de bajar de su apartamento.

Si entraba por la puerta principal, se encontraria cara a cara con Asier

De esa forma, el sabria que ella no había salido de su casa.

No tendria ninguna explicación si el la confrontara.

Desde la puerta trasera hasta el edificio donde solia vivir había una cierta distancia, y Elia no podía hacer que Asier esperara demasiado tiempo, asi que empezó a

correr hacia alli

Como por detrás del edificio y cuando llegó al frente vio un Rolls–Royce negro estacionado bajo una farola. El lujoso color negro, bajo la luz amarilla de la farola, parecia emitir una luz fria que era intimidante.

Ese tenia que ser el auto de Asier

Elia se apresuro hacia él y a través de la ventana del auto vio a Asier sentado en el asiento trasero, con una mirada fria en su rostro.

El corazón de Ela se detuvo, su respiración se volvió agitada

Tomo unos segundos para respirar hondo varias veces y calmarse después de correr

Levanto la mano y con nerviosismo, locó la puerta del auto

Hubo un “clic” y la puerta del auto controlada a distancia se abno

Cuando se abrió la puerta, un aura fria se derramo, y el aire opresivo y helado cayó sobre la piel de Elia, haciendo que se le anzara la piel.

L

Comment

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Options

not work with dark mode
Reset