Capitulo 306
¿Por qué diablos estaria Asier aquí?
Dios mio, Abel sigue en el baño
Si Abel sale y llamaba mamá a Elia después de verla, y Asier está aqui…
Elia inhaló profundamente casi sin pensarlo
Sus palabras no fluían “Sr. Griera, que coincidencia, también viniste al baño.”
Los ojos profundos de Asier la miraban fijamente También vas al baño de hombres?”
“Si, oh no no no, acabo de salir del baño de al lado Elia estaba nerviosa, siempre preocupada que Abel saliera en ese momento.
Ella asintió con la cabeza, y luego reaccionó rápidamente, corrigiéndose apresuradamente
Dándose cuenta de que estaba parada en la puerta del baño de hombres, explicó rápidamente: “Acabo de escuchar a alguien hablando, diciendo que un hombre dejó a una mujer embarazada de cuatrillizos y luego no se hizo responsable. Tenia curiosidad, que hombre tiene una capacidad de reproducción tan fuerte que puede tener cuatrillizos de una sola vez? Así que vine, los estaba escuchando a través de la pared “g2
El rostro guapo de Asier se oscureció y sus cejas se arquearon ligeramente: “¿Qué más oiste?”
Elia sacudió la cabeza “Más nada, la importante es, jeste hombre es un cerdo irresponsable! Las mujeres odiamos a los cerdos como él.”
Asier tomó su mano y la llevó lejos del baño.
Ella pensó que la llevaria al centro comercial.
Pero para su sorpresa, la llevó a un pasillo de seguridad.
No habia nadie aqui, la luz era tenue, el espacio tranquilo, tenía una sensación espeluznante
A Elia le dolia la muñeca, y estaba a punto de protestar.
Asier soltó su muñeca, su espalda contra la pared, una mano al lado de su oido, su rostro guapo se acercó, su presencia masculina roció detrás de su oreja. Te importa que otras personas tengan hijos?”
El nervio sensible detrás de la oreja de Elia, se sentia cosquilleada por su caliente aliento.
Le picaba el cuello: “Sr. Griera, creo que te has confundido.”
El levantó su barbilla, levantó su rostro, su mirada penetrante, su voz magnética ¿Por qué no pruebas… mi capacidad de reproducción…”
“No necesito… umm… Justo cuando Elia estaba a punto de negarse, los labios delgados de Asier bajaron, besandola en la boca.
Le quito el aliento.
Elia estaba desesperada.
Queria decir que no queria probarlo de nuevo. ¡Ya sabia de su capacidad de reproducción!
Fue asombroso.
Además, los dos hombres en el baño estaban justamente hablando de Asier.
Asier no lo sabia, pero Elia lo sabia claramente.
Mientras Asier la besaba, el sabor dulce en su boca, como una gelatina de frutas, era suave, dulce, y adictivo.
Pero notó que ella estaba distraida.
Asier la forzó a mirarlo a los ojos y le dio un beso más profundo.
Elia cayo en su seducción.
Al principio, Elia estaba pensando en otras cosas, empujándolo con fuerza, pero poco a poco, su respiración comenzó a seguir la de el, e incluso se
olvido de inhalar
En poco tiempo, se sintió un poco mareada, como si se le estuviera agotando el oxigeno.
Cuando estaba a punto de asfixiarse, Asier la soltó
Elia se apoyo debilmente en el pecho de Asier, jadeando.
El brazo largo de Asier la rodeo, permitiéndole apoyarse en su pecho, justo como aquella noche hace cinco años, cuando ella yacia en sus brazos, jadeando sin cesar
Pensando en aquella noche hace cinco años, la garganta de Asier se tensó un poco
Su voz se volvió un poco ronca: “¿Viniste sola?”
Esta mañana, él la invitó a salir, pero ella dijo que tenía que volver a casa.
¡Y por la tarde, ella apareció en el centro comercial otra vez!