Capítulo 272
Elia giró hacia la dirección de la voz y vio a un hombre de figura esbelta, luciendo un traje de rayas azules sobre una camisa negra, adornado con hilos dorados. Llevaba pantalones bien arreglados y un par de zapatos de cuero negro a la moda.
El aire que emanaba de él te hacía pensar que era un joven noble
Por lo general, su rostro siempre llevaba una expresión suave, pero en este momento se veia serio y frío, sus ojos hermosos llenos de furia. ¡Ese era Sergio!
Se acercó y se quedó al lado de Elia, su mirada afilada, mirando intensamente a Betiana
Betiana, que habia estado bravuconeando frente a Elia, perdió su confianza al ver a Sergio. Intentó ganarse su favor y sonrió diciendo: “Sergio, Elia no es una buena persona, seguro tiene otros planes maliciosos con el Sr. Griera.”
Sergio era el primer bisnieto de Benjamin, es el más joven de la familia Griera, tres años menor que Asier, y su posición en la familia Griera era muy importante
Era un joven muy querido por todos.
Betiana, como la hija de la familia Abreu, por supuesto que lo conocía.
Habia estado fanfarroneando frente a Elia, pero al ver a Sergio, su arrogancia se convirtió rápidamente en adulación y cortesia.
La mirada de Sergio se volvió aún más fria, como una espada afilada apuntando directamente a ella Te lo diré una vez más, pidele disculpas! De lo contrario, le haré la vida imposible a la familia Abreu.”
Sus ojos estaban llenos de furia Betiana todavia tenia una pequeña esperanza de que Sergio se pondría de su lado, pero no esperaba que Sergio fuera tan firme
¿Que encanto tenia Elia que no solo había confundido a Asier, sino que incluso Sergio la protegia tanto?
Betiana estaba molesta, pero debido a la presencia de Sergio, y al temor de las represalias de la familia Griera, bajó la cabeza y dijo a regañadientes: “Lo
siento”
“¿A quien le estás pidiendo disculpas? ¿Quién puede oirte con esa voz tan baja?‘ Dijo Sergio friamente.
Betiana se sobresaltó con su voz, inmediatamente levantó la cabeza para mirar a Elia, bajo la cabeza y dijo seriamente. “Elia, lo siento, me equivoque, por favor perdoname”
Elia miró a Betiana disculpándose frente a ella.
Su enojo no disminuyó con esta disculpa, sino que sintió que la disculpa forzada de Betiana estaba llena de resentimiento.
Ella dijo friamente “No te perdono porque sea una mujer blanda, sino porque no quiero ser como tú y arremeter contra la gente sin razón.”
Betiana estaba tan consternada por sus palabras que no sabia qué hacer. Estaba a punto de refutar a Elia, pero Sergio, con una sonrisa burlona, le dijo: Tiene razón, Srta. Abreu, deberias entender el significado de sus palabras.”
Después de decir esto, él asumió naturalmente el papel de protector, poniendo su brazo alrededor de los hombros de Elia y se alejó con ella. Este gesto, aunque era protector, le parecia a los demás que eran muy intimos.
Al ver a Sergio con su brazo alrededor del hombro de Elia, Betiana se quedó boquiabierta. Sacó rápidamente su teléfono y les tomo una foto a sus espaldas.
Estaba segura de que la relación entre Sergio y Elia definitivamente no era tan simple.
Ella sabia que Elia había trabajado en el departamento de limpieza, asi que buscó a Fernanda para que organizara una comida para los empleados e invitara a Elia.
Originalmente planeaba humillar a Elia frente a todos los trabajadores de limpieza, diciendo que ella era solo una limpiadora intentando ser rica. Planeaba darle una bofetada primero, luego hacerle pasar verguenza en la empresa para que no pudiera mantenerse en el Grupo Griera.
¡Pero no esperaba descubrir la relación entre Sergio y Elia!
Por este descubrimiento, la deprimida Betiana se volvió un poco más alegre
Los demas en el cuarto contuvieron la respiración y se quedaron en silencio, sin atreverse a hacer un ruido
Fernanda fue comprada por Betiana, quien organizó esta cena de empleados de último momento.
Betiana afirmó que ella era la prometida de Asier, que en el futuro seria la Sra Grieral Las otras mujeres solo trataban de seducir al Sr. Griera y usurpar su posición
Como la prometida oficial, tenia que lidiar con esas mujeres!
