Capítulo 1483
Hacia dos meses, Jimena terminó en el hospital al sufrir un accidente de coche y tuvieron que operarla. Por suerte, logró salvarse y, después de quince días internada en el hospital, le dieron el alta. Desde entonces, Lola se había encargado de cuidarla.
Durante todo ese tiempo, Elia había estado ocupada atendiendo a Asier y no había tenido oportunidad de visitar a Jimena, ni sabía cómo iba su recuperación.
“Ya puedo caminar y saltar, estoy bastante bien. Solo que a veces me duele mucho la cabeza,” contaba Jimena.
“Tu problema fue la conmoción cerebral. Necesitas descansar por lo menos seis meses, no te descuides,” le recordaba Elia.
“Claro, tengo que faltar al trabajo por medio año. Tenía un proyecto de diseño entre manos que no he podido terminar, y en la empresa me están presionando para que retome y entregue los bocetos. Ahora, cada vez que intento pensar, siento un dolor terrible. ¿Cómo voy a poder hacer esos diseños?” Jimena se mostraba desconsolada.
No podía permitirse perder el trabajo. Tenía dos hijos que mantener y tenía que pagarle a Lola. Si se quedaba sin empleo, los niños se quedarían sin sustento y tendría que despedir a Lola, quedándose sin nadie que los cuidara.
¿No sería eso añadir más problemas a los que ya tenía?
Elia, que había pasado por situaciones difíciles, entendía los apuros de Jimena. Una conmoción cerebral no era ninguna tontería: si no se recuperaba adecuadamente, podría sufrir secuelas de por vida o, en el peor de los casos, perder la vida.
Eso no era ningún juego.g2
Después de pensar un poco, Elia dijo: “Si confías en mí, yo puedo hacer el diseño por ti. Cuando lo termine, se lo entregas a la empresa.”
“Pero tú tienes que cuidar de Asier, ¿no es así? Está en un momento crítico para despertar, no se puede descuidar ni un segundo,” Jimena no quería robarle un tiempo preciado a Elia.
Su trabajo no era nada comparado con la importancia de cuidar a Asier y de que él pudiera despertar. “Él ya despertó, ya no me necesita,” dijo Elia, intentando que su voz sonara neutra.
Pero en sus palabras, se podía sentir un profundo desconsuelo.
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“¿Qué dices? ¿Quién despertó?” La noticia tomó a Jimena por sorpresa, dejándola sin palabras, tratando de comprender quién había, despertado.
Luego, con un sobresalto, preguntó asombrada: “¿Quieres decir que Asier ya despertó?”
Al hacer esa pregunta, incluso el corazón de Jimena, que era ajena a la situación, comenzó a latir con fuerza. Elia había cuidado a Asier durante tres años, esperando cada día que despertara. ¿Quién podría cuidar a una persona en estado vegetativo por tanto tiempo?
El esfuerzo y la dedicación de Elia al fin dieron frutos. Parece que su oración diaria se había cumplido.
Incluso Jimena sentía nervios y alegría por Elia.
“Sí, Asier despertó,” respondió Elía con una calma que contrastaba con la emoción de Jimena.
“Si él despertó, deberías estar más tiempo a su lado, cuidándolo, para que sepa cuánto te has preocupado
Capitulo 1433
por el Jimena esperaba que Elia y Asier pudieran tener un futuro juntos.
Antes Jimena tenia una mala opinión de Asier, lo encontraba un hombre frio y distante, y apoyaba a Elia en cortar lazos con el y seguir adelante por su cuenta.
Pero desde que Asier arriesgo su vida para salvar a Elia, Jimena cambio de opinión, pensando que si Elia y Asier estaban juntos, él la protegeria siempre.
¿Cuantos hombres en el mundo serian capaces de arriesgar sus propias vidas por salvar a su pareja? Muchas parejas, incluso las que se aman profundamente, no podrian hacerlo, pero Asier, ese hombre “frio y sin corazón“, lo habia hecho.
Con un tono triste. Elia explicó: “No llegué a verlo. En cuanto despertó, me echó de Villa Serenidad y hasta tiró mis maletas fuera.
“¿Qué?” Jimena se quedo asombrada. Hacia un momento, Jimena pensaba que Asier era un buen hombre. pero al enterarse de lo que hizo Asier, ella se puso tan furiosa que rechinó los dientes y dijo: “¡Caray.ese Asier! No tiene vergüenza. ¡Elia, lo has cuidado por tres años y ni siquiera te lo agradece! ¿Así que te ha echado de Villa Serenidad? ¿Eso significa que no quiere tener nada más que ver contigo?”
“Supongo que si. Antes de quedar inconsciente, ya me lo había dicho: que ya no nos debíamos nada el uno al otro,” Elia confesó a Jimena sin ocultar nada.
Ella y Jimena siempre habian compartido sus corazones y confidencias, no tenian secretos entre ellas.
Capitulo 1484
Capítulo 1484
