Capítulo 1292
“No tiene gracia que preguntas por qué desde principio. Al menos deberías intentar adivinar”. Bruno animó el ambiente. De todos modos, tenia aprobación implicita del señor Griera.
Él no hablaba, pero el señor Griera incluso lo animaba con la mirada.
“Mamá, adivina, ¿por qué crees que Bruno se ha puesto tan moreno?” Elia, con una sonrisa en los labios, le dio un suave toque en el brazo a Rosalinda y preguntó.
Rosalinda había estado de mal humor todo el camino, y Elia queria animarla un poco, por eso la involucro en la conversación.
Rosalinda levantó la vista ligeramente, echó un vistazo al frente y luego miró a Elia, diciendo con pesar: “¿Qué va a ser sino? Se quemo con el sol”.
“Jaja, Rosalinda, qué lista eres, acertaste de una”. Bruno se rio,
Pero Elia no encontraba gracioso el chiste.
Era humor absurdo.
“Intenta adivinar, ¿bajo qué sol me he puesto asi de moreno?” Bruno conducia mientras hablaba, y al hacerlo, mantenia la vista fija en la carretera delante de él.g2
“Aparte del sol africano, ¿qué otro sol podría oscurecer a alguien tanto en tan poco tiempo?” “Estás tan oscuro que pareces más un trozo de carbón, ¿te has mirado al espejo?” Elia dijo entre risas.
“No me atrevo a mirarme al espejo, por si acaso no veo mi propia cara”. Bruno bromeó.
“Dime, si el mundo comparte un mismo sol, ¿por qué el sol es diferente en cada lugar? En algunos lados es tan abrasador y en otros tan frío como la Antártida Hay hielo y nieve todo el día, al igual que las personas, algunas son cálidas como el fuego, otras están cubiertas de escarcha”. Bruno hablaba y, sin miedo a morir, echó un vistazo a Asier.
Faludido
por ese comentario gelido no era otro que Asier.
Cuando Elia escuchó lo que decía Bruno, se sobresaltó y se preocupó por él.
Este Bruno no solo tenía la lengua larga, sino también un coraje enorme. ¿Acaso no temía que esta vez la enviaran al polo sur?
decía más que
Asier lo miró con una mirada fría y heladora, sin decir palabra, pero con una mirada que d mil palabras.
Bruno sonrió apenado y dijo: “Es porque la tierra está a diferentes distancias del sol, por eso la luz varía tanto. Señor Griera, con Elia tan cerca de ti, seguro que sientes un calor ardiente todos los días”.
“Si no te callas, te arranco la boca”. La voz fria de Asier sonó.
Elia se preocupó por Bruno, quien habia regresado de África con un valor digno de un león.
¿Qué sería, había recibido algún tipo de estimulo allá?
Al ver que Asier realmente se estaba enojando, Bruno, sabiendo cuándo parar, dejó de bromear y volvió al tema principal:-Señor Griera, solo dire..
cosa más, prometo que después me callo.
“¡Habla ya!” Asier soltó una palabra.
Bruno:””
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Capitulo 1292
Lo que estaba a punto de decir no era ninguna tonteria.
Pero no se atrevía a desafiar la autoridad de su jefe, había recibido su aprobación antes para soltarse, pero ahora que le estaba pidiendo que se callara, no se atrevia a seguir bromeando.
Preguntó: “Vamos de vuelta a Villa Serenidad?”
Esa pregunta tenso los nervios de Elia de inmediato.
Nerviosa, Elia miró hacia Asier. Desde su ángulo, solo podía ver el perfil de Asier, con sus rasgos bien definidos y una masculinidad imponente, aún seguia siendo una presencia intimidante.
“Puerto de Estrellas.
Justo cuando Elia temia que él dijera que irian directamente a Villa Serenidad, la voz profunda de Asier pronunció esas palabras.
Al escucharlas, el corazón angustiado de Elia finalmente se tranquilizó.
En realidad, ella también queria volver y ver a los niños, pero su madre estaba en el auto.
Como su madre estaba de mal humor y Asier no le daba buena cara a su madre, llevar tanto a ella como a Rosalinda a Villa Serenidad solo resultaría en que Asier le mostrara a Rosalinda un semblante peor. Entonces, su madre se sentiria aún más avergonzada y deprimida.
En ese momento, Elia no tenía más remedio que cuidar los sentimientos de su madre.
Elia abrazo los hombros de Rosalinda, apretando un poco más fuerte.
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