Capítulo 1138
“¿Cómo? ¿No escuchaste bien?” Orson preguntó con calma, sus estrechos ojos de halcón la miraban. con una intensidad dominante.
Luego, pronunció claramente cada palabra: “Dije que te hagas pasar por mi novia y me acompañes a casa para conocer a mi abuelo. Si lo haces, dejaré pasar lo de las burlas.”
Jimena, con sus grandes ojos redondos bien abiertos, lo miró y parpadeó, tragando saliva de la sorpresa. Si la primera vez pensó que había oído mal, la segunda vez Orson había sido muy claro.
No podia estar alucinando.
“¿Quieres que me haga pasar por tu novia para ver a tu abuelo? ¡Eres muy audaz! Entiendo que me pidas que actúe como tu novia frente a Priscila, eso tiene sentido, pero ¿presentarme a tu familia? ¿en serio
presentar a tu familia a una falsa novia?”
vas a
Jimena nunca había hecho algo así, ni tenia el valor para hacerlo.
“No te preocupes, yo me encargo de todo. ¿A qué le temes?” Dijo Orson tranquilamente. Pensándolo bien, una sonrisa burlona se dibujo en sus labios y dijo. “No será que tienes miedo, ¿eh? ¿Temes que la familia Salcedo te haga quedarte y te conviertas en la nuera?”
Eso provocó a Jimena, quien inmediatamente se paró erguida, levantó la barbilla con orgullo y dijo: “¿Yo, tener miedo? El que debería estar asustado eres tú. Si tu familia realmente quiere que te cases. conmigo, tú serías el que no sabría cómo escapar.”
“Descuida, no se fijarían en ti. Solo ayúdame a manejar esta situación por esta vez, a romper el compromiso con Priscila. Antes has dicho que te gusta el famoso actor Timothée, ¿cierto? Pues después de que todo esto termine, te ayudaré a tener un encuentro a solas con él. ¿Qué te parece?” Orson la persuadió con promesas.g2
“¿Hablas en serio?” Jimena no podia creerlo. ¿Orson realmente podría ayudarla a conseguir una cita con Timothée, para que ella pudiera encontrarse con el a solas?
Esa era una tentación muy grande.
Últimamente estaba locamente enamorada de Timothée, era su fan número uno.
“Por supuesto que es en serio. ¿Crees que el título de segundo hijo de la familia Salcedo es solo de nombre?” Dijo Orson con seguridad.
“Si es así, trato hecho. Y nada de arrepentirse después.” Jimena aceptó en el acto, la oferta era demasiado tentadora para rechazarla.
Jimena levantó su puño, extendió su meñique, despues miró a Orson con sus mejillas rechonchas y adorables.
Jimena había perdido algo de peso, pero después de su pelea con Orson, habia comenzado a comer compulsivamente de nuevo, y rápidamente había recuperado su peso anterior.
Orson observó su gesto, y le preguntó confundido: “¿Qué haces?”
Jimena se acercó, tomó su mano, enlazó su meñique con el de él y dijo: “hagamos una promesa de meñique, una promesa para toda la vida, quien la rompa será un sapo.”
Orson soltó una carcajada y dijo: “Qué infantil.”
“Más que tú, imposible” Jimena le lanzó una mirada y salió del reservado primero.
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Capitulo 1138
Orson sonrió y la siguió.
Al llegar junto a Elia, que estaba al borde de la mesa, Jimena se inclinó y le susurró algo al oído.
Elia la miró sorprendida, luego sonrió y dijo: “Ve, yo me las arreglaré para volver a casa.”
Dicho eso, echo un vistazo a Orson, que había venido con Jimena. Podia notar que si Jimena aceptaba la propuesta de Orson, era porque aún no había renunciado a él.
“No tomes un taxi, toma mis llaves y conduce a casa. Mañana llevas el coche al Grupo Fuentes y allí lo recogeré” Jimena le entregó las llaves del coche y añadió: “De todas formas, he bebido y no deberia conducir.”
“Está bien, cuidate.” Elia aceptó las llaves y despidió a Jimena con unas palabras cordiales, echando otra mirada a Orson que estaba detrás de ella.
“No te preocupes, no le haré nada.” Orson no podía dejar de notar la advertencia de Elia, quien estaba preocupada por Jimena.
“Así está mejor.” Elia respondió.
Orson y Jimena salieron del bar.
