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¡Domesticame! Mi pequeña y gran Elia 1069

Capítulo 1069

Asier sintió cómo el rojo carmesi brotaba en sus fríos ojos, sus mejillas se movian levemente al contener su ira, la mujer frente a él provocaba su furia una y otra vez, desafiándolo con locura.

¡La verdad, tenía ganas de matarla, asi, todo se resolvería al instante!

Pero al verla tan dolorida y obstinada, su corazón dolla incluso más que el de ella.

“Gabriel te encerró en la habitación para entregarte a Ramiro, ¿verdad? ¿Cuánto dinero le dio Ramiro? ¿Qué hiciste con Ramiro en esa habitación? Asier contenia la furia que le palpitaba en las sienes, dándole otra oportunidad para que explicara lo sucedido de principio a fin.

El corazón de Elia se apretó de dolor, mirándolo incrédula: “¿Así que en tus ojos soy alguien que se puede intercambiar por dinero, que puede acostarse con cualquier hombre asi nomás? Vaya, así de baja me consideras”.

Con una sonrisa amarga y sarcastica, incluso cuando su mandibula y su corazón le dolían hasta el ahogo, ella mantenia la sonrisa en su rostro.

“Si no es asi, ¿entonces qué estás ocultando?” Asier apretaba los dientes, exigiéndole una respuesta.

“Ya te lo dije, lo hice para proteger a Gabriel, porque él es mi padre”, Elia repetía la misma razón.

Gabriel la habia amenazado antes de irse, diciendo que si lo delataba, publicaria un video donde él perjudicaba a su madre.g2

Si ella acusaba a Gabriel, su madre estaría en peligro de ser deshonrada y podría no sobrevivir al golpe.

En ese momento ella no podía correr ese riesgo.

Asier la miraba fijamente con ojos agudos y sombrios, sus mejillas tensas por la furia contenida, viendo cómo Elia parecía resignada a su suerte, su decepción crecia por momentos.

Sus palabras eran como un puñal en el corazón de ella.

“El bebé que llevas, ¿es de Ramiro?” Asier casi jadeaba al decirlo, lleno de rabia, incapaz de aceptarlo.

Todas las preguntas que le había hecho eran para darle la oportunidad de explicarse, de negar sust sospechas.

Pero la manera en que ella actuaba, solo confirmaba sus temores.

Aquella noche, ella le había mentido diciendo que iba a buscar un apartamento con su madre, pero ent realidad había ido a encontrarse con Ramiro. Después de regresar, se tomó tres pastillas anticonceptivas, terniendo que no funcionaran y que el bebé se hubiera concebido esa misma noche.

Además, a pesar de haber sido ella la secuestrada, la víctima, insistia en proteger al criminal y cubrir su

encuentro con Ramiro.

Luego, se habia escapado con Ramiro y los cuatro niños.

¿No era todo porque Ramiro era el padre del niño que llevaba en su vientre?

Al escuchar las palabras de Asier, las pupilas de Elia se contraían en shock. Miraba el bello rostro de Asier, sus rasgos tensos, sus ojos oscuros y amenazadores. De repente, él le parecía más extraño que

nunca.

Como si nunca lo hubiera conocido de verdad, como si solo hubieran sido dos extraños que se cruzaron en el camino.

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15.10.

Magic ante une amega brotaba se sajesës profundo de seu sei Chen, who manca i Toba

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212

Mientras lo observaba, una risa amarga brotaba en lo más profundo de su ser. Claro, ella nunca lo habia entendido del todo, ¿cómo podria realmente conocerlo?

¡El sospechaba que el hijo que esperaba era de Ramiro!

Si pensaba asi, significaba que creia que ella habia estado con Ramiro.

Así que en su mente, ella era realmente esa mujer despreciable, una mujer fácil.

“Si digo que no, no me crees, ¿qué más quieres que diga?” Elia respondió con calma, comprendiendo profundamente el significado de que no hay nada más doloroso que un corazón roto. En ese momento, sintió esa frase más verdadera que nunca

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