Switch Mode

Boda Relampago: El Lazo Inesperado Capítulo 77

Capítulo 78

Hugo no creia que Enzo fuera una buena persona, preguntó con dudas: “¿Estás seguro?”

“Seguro Enzo colgó el teléfono sin dudar. No era que sintiera simpatía por esa mujer, sino porque él también tenia una abuela, lo que le permitia empatizar con ela.

Al pensar en su abuela, de inmediato llamó a la abuela Luisa. Últimamente, su estado de ánimo no habla sido bueno debido al divorcio de Enzo.

El mayordomo respondió al teléfono, “Joven, ella dice que no quiere oir tu voz.”

Enzo sacudió la cabeza con resignación, “Dile a la abuela que parece que la abuela de esa mujer está enferma ”

“¿Qué? ¿Dices que la abuela de Carla está enferma?” La voz de la abuela Luisa llegó, “¿Cuándo sucedió esto? ¿Por qué no me dijiste antes, muchacho…”

Enzo no supo cómo responder.

Habla llamado a su abuela tan pronto como se enteró de las noticias.

……

Carla se sentó al lado de la cama de su abuela, observándola en silencio, mirando su cabello blanco como la nieve, mirando sus mejillas arrugadas y delgadas. Su corazon se sentia amargado y dolido.

Hace unos años, cuando dejo Bella Salamanca, su abuela se vela mucho más joven de lo que estaba ahora. En solo unos años, su abuela se habia vuelto tan vieja.

Su abuela tenia una pensión, por lo que no le faltaba dinero. A pesar de su edad, aún salia a dar clases particulares a otros. Carla siempre pensó que su abuela trabajaba tan duro no solo porque no podia quedarse quieta, sino también porque tenia un hijo desobediente.

Hasta hoy cuando le dio la tarjeta banana, Carla entendió que su abuela hizo todo eso para su nieta, para que Carla llevara una mejor vida.

Al pensar en esto, las lágrimas rodaron incontrolablemente por las mejillas de Carla. No tenia madre y su padre habia fallecido hace mucho tiempo, pero el amor que su abuela le daba nunca era menos que el de otros niños

Fue gracias a su abuela que pudo ir a la escuela como los demás niños, ingresar a la universidad de sus sueños y hacer el trabajo que le gustaba Pero parecía que nunca se había preocupado lo suficiente por su abuela……..

De repente, su teléfono sond. Carla rápidamente secó sus lágrimas, tomó su teléfono y salió de la habitación. Al ver que era una llamada de la abuela Luisa, aún grito dulcemente, “Abuela…..”

La abuela Luisa noto que Carla habla estado forando, “Carlita, ¿has estado lorando? ¿Tu abuela no está bien?”

Carla respiro hondo y ajustó su estado de ánimo, “No te preocupes, mi abuela ya está fuera de peligro. El médico dijo que se recuperaría rápidamente siempre que el tratamiento posterior fuera adecuado.”

La abuela Luisa no lo creia, “¿Que enfermedad tiene tu abuela? ¿Necesita ir a Mussani para recibir tratamiento? Si necesita ir a Mussani, puedo pedirle a Alejandro que lo organice.”

Carla no queria preocupar a la abuela Luisa ni depender de Alejandro, “Realmente no es nada.”

Carla no quería hablar de ello, y la abuela Luisa no preguntó más. Después de un momento de silencio, ella dijo, “Carlita, lo siento Le fallé a tu abuela y también a ti. Fui yo quien hizo que Alejandro se casara contigo, y prometi a tu abuela que el cuidarla bien de ti. Pero ahora, ay…

Carla supuso que Alejandro ya le habia contado a la abuela Luisa sobre el divorcio, “Fue nuestra decisión como pareja. No le has fallado a nadie y no debes sentirte culpable.”

En su corazón, la abuela Luisa era como su propia abuela, ambas eran ancianas amables y bondadosas. Ella queria que la abuela Luisa estuviera sana y feliz.

Cuanto más bondadosa y comprensiva era Carla, más culpable se sentia la abuela Luisa, “Carlita, no me he puesto en contacto contigo durante más de un año que llevas casada con Alejandro, no porque no te valore, sino porque valoro mucho la relación con tu abuela. Después de casarse, Alejandro se fue a trabajar y te descuido, no cumplió con mi promesa inicial. Por eso tenia miedo de enfrentarme con tu abuela, y temia

contactarte.”

Carla en aquel entonces tenla muchas suposiciones sobre por qué la abuela Luisa no la vela, pero nunca se imaginó que fuera por esto.

Todas las dudas en su mente desaparecieron, “Abuelita, no te preocupes, sin importar cómo se mi relación con Alejandro, no afectará la relación entre mi abuela y tú”

Abuela Luisa suspiró con tristeza, “Eres una buena chica, mi nieto simplemente no tuvo suerte.”

Comment

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Options

not work with dark mode
Reset