Capítulo 584
Cuando creció su abuela le dijo: “Todos somos Individuos úricos, cada uno tiene el derecho de elegir cómo vivir y ser feliz. Una mujer no debería ser limitada por el matrimonio y los hijos, tienen el derecho de elegir cómo quieren vivir. Tu madre solo hizo una elección entre dos estilos de vida. eso es todo, y no hay que juzgarla“.
Por eso, Carla nunca tuve ningún reproche hacia su madre, Pensaba que, si un día se encontraria con su madre en la multitud, si ella estuviera dispuesta, estaria dispuesta a llamada sinceramente mamá con cariño,
Luego llegó Enzo y vio los ojos de Carla ligeramente rojos bajo la luz de la luna y le dijo pesadamente:” “Carla, lo siento, me comporté mal pero por favor creme, no estaba aprovechandome“.
Había soportado tanto tiempo, ¿por qué no pudo controlarse en ese momento? En ese instante, solo tenia una idea en mente, queria tomar su mano y sentiria.
Carla se volvió para mirarlo, él estaba parado bajo la luz, la luz se demamaba sobre él dándole una belleza dificil de evitar mirar
“No tiene nada que ver contigo, solo estaba pensando en mis padres“. Carla se froto los ojos y señaló la luna en el cielo “Director Farré, ves ä dos personas saludándome desde la luna? El hombre es mi padre, la mujer debe ser mi madre.
“Tienes un excelente padre“. Enzo no querla hablar sobre los padres, no queria que esas dos personas amuinaran su buen humner aquella noche: “Levántate y camina conmigo un rato, ayuda a digerir la comida, Sentarte all puede causar ingestion”
Carla nego con la cabeza, rechazándolo contésmente. Estoy muy llena, no quiero movenne“.
Él se acercó a ella, dándole la sensación de que, si no se levantaba, ella levantaria, entonces Carla se levanto de inmediato: “He persado en ello, tienes razon. Un poco de actividad después de comer ayuda a la digestión“.
Enzo se detuvo, sus ojos se estrecharon y de repente extendió la mano hacia ella, pero ella retrocedió asustada: “Director Farré…“
Bajo su mirada, Enza se agacho, recogió el cl*p de pelo que habia caido al suelo y lo guards naturalmente en su bolsillu.
Carla: “Director Farré, ese cap de pelo es mio“.
*¿Es tuyo?“. Enzo sacó el cl*p de pelo, lo levantó a la luz y lo miró detenidamente: ¿Tienes alguna prueba de que esto es tuyo?“.
Carla: “…”
¿Qué estaba hacendo?
¿Estaba tratando de quitarle su cl*p de pelo?
Carla pensó un poco y encontró una forma de probar que el cl*p de pelo era suyo. “No me le lavada el pelo en dos dias, este cl*p de pelo definitivamente huele a mi
Antes de que pudiera terminar de hablar, Enzo levantó el cl*p de pelo hasta su nariz y lo ollated, “Este cl*p de pelo huele bien, asi que no puede ser tuyo, tú no te bañaste“.
Carla abno los ojos sorprendida, no podia creer que Enzo dina y haria algo asi
¿Cómo podria alguien normal tener la afición de coleccionar adornos de cabello de otras personas?
Carla lo mire con resignación, cómo elmetia su adomo de pelo en su bolsillo: “Vamos a dar un pased“.
Carla
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No queria caminar con él en absoluto, no lo queria en absoluto. Pero como su asistente, siempre que las demandas de su jefe fueran razonables, no tenia razón para rechazarlas.
Enzo deliberadamente redujo su paso para que Carla pudiera seguirle el ritmo, caminaban juntos, el siempre delante y ella sempre detrás. Las Brisas del Mar era una mansión, el jardin interior era tan grande que podrian caminar lentamente durante una o dos horas. Doña Marta se escondió en un lugar secreto, sacó su teléfono y tomó una foto furtiva de los dos de espaldas.