Capítulo 50
Enzo sonrió: “Lo siento, creo que los hice esperar mucho tiempol
☐ hombre a la izquierda también sonrid: “No te preocupes, lo entendemos, ustedes dos, marido y mujer, no se han visto en mucho tiempo, seguramente tenian muchas cosas de qué hablar“.
Comparado con Enzo, parecían estar más interesados en Carla: “Por qué no nos presentas a tu compañera?“.
“Esta es mi amiga Carla“. Enzo dijo amiga, na asistente.
Los tres hombres preguntaron al unisono: “¿Tu amiga? ¿Seguro que solo una amiga?”
Carla sonrid: “Soy la asistente del Sr. Farré“.
Al escucharla explicar ansiosamente quien era, la mirada de Enzo se oscureció ligeramente, luego comenzó a presentada: ‘Carla, estos son Mauro Pinales y su esposa Azula Mandes de la Ciudad Capital, Jocel Fermin y su esposa Rosa Fermin de Mejorada del Campo. Noé Ramirez y su esposa Susana Ramirez de San Getafe“.
Carla nunca habla conocido a estas personas, pero par sus nombres, podia decir quiénes eran. Todos eran personas importantes.
Claro, los amigas de gente influyente también son influyentes, y los amigos de las personas quapas también son guapos.
Habla rumores de que Hércules Construcción Co. y Josel de Mejorada del Campo teniar diferencias, pero por la forma en que hablaban, obviamente hablan sido amigos durante muchos años.
Después de saludar a las tres personas, Carla escucho a Josel, que estaba en el medio, decir: “Enzo, todos trajimos a nuestras esposas, ¿qué pasa con tu esposa? ¿Por qué traer a tu asistente?”
Carla: “…”
Si, ¿que estaba haciendo aqui en una reunión privada como asistente?
¿No ven que está muy incómoda ahora?
La respuesta de Enzo fue direcia: “Mi esposa y yo no ros llevamos bien, estamos en un proceso de divorcio. Pero ustedes dijeron que tenía que traer una compañera, asi que tuve que pedirle ayuda a una gran armiga“.
Al escuchar esto, todos mostraron expresiones de sorpresa Finalmente, Josef preguntó en nombre de todos Te vas a divorciar? La última vez. Incluso fuiste a Paris y gastaste veinte millones er solo un colar para ella, y ahora te vas a divorciar?“.
La respuesta de Enzo fue igual de trivial: “No nos llevamos bien“.
No quiso decir más, y los demás tampoco preguntaron más.
Rosa, viendo la incomodidad de Carla, intervino amablemente: “Todos aqui nos conocemos Sria. Barceló, no tienes por qué sentirte incomoda“.
¿Cómo podria relajarse Carla en una reunión privada como esta? Sin embargo, asintió y dijo: “Esta bien“.
“Cario, ustedes sigan hablando, nosotras iremos con Carla a comer algo. Las tres jovenes y belas damas llevaron a Carla a la zona de comedor.
A pesar de que sólo había unos pocos invitados, había mucha comida en el restaurante, todo tipo de aperitivos y bocadillos internacionales exquisitos. Habla comida oriental y occidental.
Carla no habla comido mucho al almuerzo, asi que estaba un poco hambrienta.
Tomo algunos de sus bocadillos favoritos, y luego pidió al chef que preparara una langosta.
Rosa, viendo a Cara disfrutar de su postre, preguntó con envidia: “Carla, ¿cómo haces para comer tanto y no engordar?“.
Rosa sólo habia pedido un pequeño filete, una pequeña porción de frutas y verduras. Ni siquiera se atrevía a pensar en los dulces.
“Siempre y cuando quemes más calorias de las que consumes, no engordarás“. Carla levantó la vista hacia ella, sintienda que le resultaba familar
Después de pensar un poco, Carla finalmente recordó quien era: “Eres la famosa actriz Rosa?”
Rosa sonrid: “Ay, perdón, no me maquillé hoy y aun asi me reconociste, eres muy İsta“.
‘Cres punds hermosa en persona que en la television. Carla era una gran fan de las telenovelas de Rosa. Era joven, bonita y talentosa
Carla recordaba que su imagen pública era la de soltera, hace un tiempo incluso hubn rumores de que tenia un novio rico, pero resulta que ya estaba casuda, y la comparila de cine de su esposo era la número, uno en todo el pals.
Estaban charlando, cuando Josef se acercó y se sentó al lado de Rosa, rodeandola con un brazo y besándola en la cabeza
Después del beso, Rosa cogió el último trozo de lafe que quedaba y se lo dio de comer a Josel, sudulzura y afecto eran evidentes en cada gesto. Carla nunca habla presenciado una escena as instintivamente desvió la mirada, pero en un descuido, su mirada se encontró con la de Enzo.