Capítulo 484
Enzo agarró el tenedor, listo para probar un bocado. Carla lo observaba con su frente fruncida y su esfuerzo por tragarse la comida, y de repente lo encontró un poco encantador: “Director Farré, si no quieres comerlo, no te fuerces. Este tipo de comida no es del gusto de todos. Supongo que a tu esposa tampoco le gustaria, asi que no tienes que forzarte en comerlo“.
Enzo respondió repentinamente: “Si a ti te gusta, estoy seguro de que a mi esposa también le gustarí“.
Esto dejó a Carla sin palabras Bajo su mirada, Enzo comid varias langostas fritas. Esa comida era grasosa y con sabor a quemado, al primer bocado, te hacia querer vomitar. Enzo realmente no entendia por qué Carla podia comerlo con tanta felicidad.
Carla recordó las palabras de Estrella: “Director Farré, se dice que las langostas son ricas en proteinas. Si comes més, debería ser beneficioso para ti“,
Después de todo, todavia era joven y parecía estar en buena forma, por lo que probablemente podria recuperarse.
Enzo preguntó: “¿Crees que necesito mejorar mi salud”.
Carla:”
Enzo volvió a preguntar: “Hay algo que no te guste comer?
Se dio cuenta de que durante todo el tiempo que habian estado juntos, ella nunca había sido quisquilosa con la comida, comia de todo. No importaba que comida fuera siempre podia disfrutarla.
e no me guste comer. Mi abuela solía decir que era fácil criar a un niño como yo porque nunca fui
Carla pensó un momento: “No creo que haya algo que no me quisquillosa con la comida.
Aunque parecía una broma. Enzo entendió de inmediato la tristeza de Carla Su madre murió poco después de que ella nació, y su padre murió en un accidente de coche cuando ella era solo una niña. Para cualquier niño, eso seria un golpe devastador. Ella tuvo que obligarse a crecer fuerte, ocultando
su vulnerabilidad
Carla dijo: “Director Farré, terminamos con esto, vamos a otro lugar a comer“.
Enzo respondió: “De acuerdo”
Dejaron el lugar. Carla compró una porción de ostras asadas. Carla amaba su sabor único, pero alguien que no estuviera acostumbrado a él tal vezno podria comer ni un solo bocado, le dijo: “Director Farré, no te molestes en comer esto, no creo que sea de su agrado”
**Sicomi esos grillos, por qué no podria comer esto? Solo con el lloc Enzo sintió ganas de vomitar, pero igualmente pidió una porción para acompañar
a Carla a comer.
Carla prácticamente le hizo probar todas las comidas de la Calle del Sabor. En el camino de vuelta, el estómago de Enzo estaba revuelto, pero no se
notaba en su rostro
Carla, que estaba en el asiento del copiloto, no tenia idea. Se acarició el estómago y envió un mensaje de voz a Manuel Rodriguez e Irene Garcia: “Manu, Ire, la comida de la Calle del Sabor en Nuevavista es realmente muy buena. Es una pena que ustedes no estén aqui, no me siento satisfecha comiendo sola, todavia hay muchas cosas que quiero probar“.
Enco:***
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Habla estado con ella toda la noche, pero ella ni siquiera lo mencionó