Capitulo 482
Itermind de comer lentamente y le dijo a Carla con orgullo: “Ya terminé ¿Qué vamos a probar ahora?“.
labia comida por todas partes en esa calle, Carla queria probarlo todo. Pero lo que más le llamaba la atención eran los grillos fritos, un platillo exótico ue muchos turistas no se atrevían a probar. Carla habia escuchado antes que a la gente de Nuevavista le gustaba comer grillos fritos. Muchos se amorizaban con la idea, pero Carla estaba ansiosa por probarlos.
‘ese dia, ese platillo estaba justo frente a ella, como podria Carla resistirse a probarlo?
Director Farré, ¿te atreves a probar esto?“. Dejando de lado cuan repugnante podria parecer, muchos de los puestos de comida aqui ponían la comida irectamente en la entrada, sin ninguna protección. El polvo del suelo probablemente volaba sobre la comida. ¿cómo podria Enzo tener apetito abiendo eso?
Tero al ver a Carla tan emocionada, no pudo soportar decepcionarla: “Está bien“.
Carla corrió y pidió una ración de grillos fritos: “Director Farré, vamos a sentamos adentro primero. Seguiremos caminando después de comer“.
Está bien“.
lugar estaba lleno de gente, todas las mesas estaban ocupadas, Carla vio una mesa para cuatro con sólo dos personas, un hombre y una mujer, y ápidamente les preguntó: “¿Está ocupado aquí?”
La mujer dijo: “Sr.
El hombre dijo: “No“,
Claramente, la mujer no queria que se sentaran alli, pero como no habla otros lugares disponibles, Carla no tenia otra opción. Primero limpió la silla y la mesa con una toallita desinfectante y luego amó a Enzo: “Director Farré, aqui
El lugar ya era pequeño, y Enzo, que era alto, se vela como un gigante en el lugar, provocando una fuerte sensación de opresión en las personas. La chica que estaba compartiendo la mesa con ellos estaba llena de quejas, pero cuando vio la cara de Enzo, se quedó muda
El hombre a su lado se molesto, le dio un golpecito en el braza: “¿Qué estas mirando?“,
La mujer dijo: “Sólo tú puedes mirar a las mujeres guapas y yo no puedo ver a los hombres guapos?”.
El hombre: “…
El hombre no dijo nada, la mujer no retrocedió, incluso se volvió más audaz con sus palabras: “Estaba ciega cuando decidi casarme contigo, eres un pobre diablo. Ni siquiera puedes llevarme a un lugar decente para una cita“.
El hombre bajo la cabeza para comer, ignorando sus palabras, pero la mujer se enojo aún más por no obtener una respuesta: “Siempre me ignoras cuando te hablo“.
El hombre se enfadd: “Siempre dices que soy inútil, ¿edmo esperas que te responda? ¿Qué quieres oir?
La mujer echo un vistazo en dirección a Carla y Enzo: “No puedes aprender de otros hombres? ¿Ves cómo tratan a sus esposas?“.
El hombre también mird en dirección a Carla, noto que sólo habian pedido una pequeña ración de grillos, no hablan pedido ningún otro platillo, sólo Carla estaba comiendo, mientras Enzo miraba a Carla.
El hombre pensé que él era mejor que Enzo, al menos habia pedido
dos tazones de arroz y un plato de verduras.