Capítulo 411
Doña Maria, la ejecutora de plan, siempre quiso que Enzo trajera a la señora de la casa lo antes posible.
Ella creia que, con la llegada de la dueña, seguramente se agregaria calidez a esta casa fria y Enzo, ya no estaria solo.
Doña Marta también esperaba que la dueña pudiera calentar su corazón, ayudarlo a olvidar esos malos recuerdos lo más pronto posible, y salir de las sombras de su infancia.
Esta noche, sin trabajo pendiente, Carla queria salir a cenar con Manuel e Irene, pero le daba verguenza rechazar la hospitalidad de Doña Marta, “Doña Marta, puedo comer una vaca, temo que la comida que haces no será suficiente para mi.”
“Hice mucho, seguro que hay suficiente para todos. Doña Marta, emocionada, llevó a Carla al comedor, “Carlita, estoy muy feliz de que hayas venido.”
Aunque Doña Marta siempre habia sido amable con Carla, su excesiva elusividad hoy la dejó un poco abrumada.
Ella miró a Enza inconscientemente, escuchandolo decit, “Doña Marta te quiere mucho.”
Doña Marta continuo, “Carlita, te quiero mucho y espero que también me quieras.”
Carla siempre tenía problemas para rechazar la bondad de los demás, “Dona Marta, también te quiero.”
Doña Marta agregó. “Enzo, realmente me gusta Carlita, si estás de acuerdo y Carlita también, me gustaria invitarla a cenar aqui con frecuencia.”
Enzo miró a Carla, “Doña Marta te adora, siempre me habla de 1. Si tienes tiempo, ven y charla con ella.”
¿Cómo podria Carla rechazar una invitación del director en persona?
¡No podia!
Pero incluso sin la invitación de Enzo, Carla estaria dispuesta a pasar tiempo con Doña Maria. Carla nunca habia conocido a su madre, y sospechaba que Doña Marta era de la misma edad que su mamá La primera vez que vio a Doña Maria, Carla sintió como si hubiera conocido a su madre
Si su madre no se hubiera ido cuando era joven, habria espemdo a que ella llegara a casa con una mesa llena de comida, como Doña Moria?
Carla no se atrevía a pensar más en ello. Cuanto más pensaba en algunas cosas, más decepcionada se sentia
Cuando era una niña y su pensamiento no estaba completamente formado aún, culpaba a su madre en su corazón, culpaba a su madre por abandonar a su padre cruelmente, culpaba a su madre por dejarla, una niña aún en pañales, y por abandonar a su hogar.
Pero más tar de, después de algunas experiencias, dejó de culpar a su madre. No sabla por lo que habia pasado su madre, no sabía por qué su madre tuvo que irse, no tenia derecho a culpar a su madre
Sin haber experimentado el dolor de los demás, no debería juzgar sus acciones.
Pronto, Dona Maria sirvió la cena, toda la cena estaba conformada por los platillos tipicos del lugar natal de Carla, ninguna era platillos que Enzo le gustaba, aparentemente ella preparo todo una mesa de comida especialmente para Carla. Carla habia estado viviendo en la ciudad P durante más de un mes, ya estaba harta de la comida local y extrañaba la comida de su lugar natal todos los dias. Ahora la deliciosa comida estaba justo delante de ella, y no podia esperar para comer.
Dona Maria le sirvió un tazón de sopa, “Carlita, come despacio, no te atragantes.”
Carla dijo, “Doña Marta, aprendiste a hacer la comida de mi pueblo? Esta realmente deliciosa.”
Doña Marta respondió felizmente, “Me alegra que te guste. Estaba preocupada de que no te gustara si no estaba bien hecha.”
Carla respondió, “Me encanta”
Carla no solo hablaba, sino que también demostró con acciones que la comida que Doña Marta cocinaba estaba deliciosa. Enzo no comió mucho de los platos de esa noche, la mayoría fueron devorados por Carla.
Después de cenar y beber, ya eran casi las diez de la noche, Carla dijo, “Director Farré, Doña Marta, gracias por su hospitalidad, tengo que volverá casa ahora.”
Antes de que Enzo pudiera reaccionar, doña Marta se adelantó y dijo, “Carlita, es muy dificil tomar un taxi a estas horas, y Valerio nove bien de noche como para llevarte a la casa. Mejor to quedas aqui, ya arreglà el cuarto, incluso hay un juego de ropa pura que puedas cambiarte, es totalmente nueva