Capítulo 1009
Enzo estaba de espaldas a ella, parado recto. Debía estar hablando de algo, Andreo también decía algo, pero ella no podía escuchar nada, sólo podía sentir cómo la tensión se apoderaba del ambiente debido a su enfrentamiento.
Cada segundo de espera era un tormento para ella, para intentar relajarse un poco, decidió hablar con Spartak: “Spartak…”
Spartak respondió con calma: “¿Qué pasa?”
Carla dijo: “¿Podrías ir a estar con él? No me deja acompañarlo, pero no dijo que tú no pudieras estar a su lado. Ve con él, por favor…”
Spartak dijo: “El director Farré es un hombre muy poderoso, Andreo no es rival para él. Puedes
estar tranquila con eso“.
Carla: “…”
No era que no confiara en la habilidad de Enzo, sino que temía que Andreo usara los lazos, familiares para herirlo de alguna forma. A pesar de que Enzo aparentaba ser frío e insensible, en realidad era una persona muy sensible. Cuando se enfrentaba al verdaderamente despiadado Andreo, incluso si Enzo ganaba, su corazón podría salir herido.
Pero no sabía cómo expresar todo eso a Spartak, así que lo único que podía hacer era esperar en silencio, con la esperanza de que Enzo pudiera terminar pronto su enfrentamiento con Andreo rápidamente.
Carla esperó ansiosamente. Aproximadamente media hora después, Enzo finalmente se giró y caminó hacia ella. Ella se apresuró a acercarse y tomar su mano. A pesar del calor, su mano estaba tan fría como un trozo de hielo.
Ella frotó su mano: “¿Por qué están tan frías tus manos? ¿Qué te dijo?“.
Enzo sonrió con desdén: “¿Qué más podría decir? ¿No quiere simplemente obtener lo que desea de mí?“.
No quería explicarle en detalle, y Carla tampoco insistió: “Vámonos de aquí“.
Desde que llegaron, Carla sintió que algo estaba mal en ese lugar, que algo perturbaba su tranquilidad.
“Está bien, volvamos a casa“. Enzo tomó su mano y comenzó a caminar hacia la salida, con Spartak siguiéndolos desde atrás. Justo cuando estaban a punto de salir, la voz de Andreo
volvió a resonar desde atrás.
“Enzo, Hércules es el fruto del arduo trabajo de generaciones de la familia Farré, no es solo tu imperio empresarial. Deberías compartir la parte que les corresponde a tus hermanos y hermanas, de lo contrario, no me importará arruinar todo Hércules, dejándonos a todos sin nada“.
10:56
Capítulo 1009
Enzo, aun sosteniendo la mano de Carla, no miró atrás y continuó caminando, ignorando completamente sus amenazas.
Carla apretó fuertemente la mano de Enzo y levantó la vista para verlo. Su rostro estaba inexpresivo, y ella no podía saber lo que realmente estaba pensando. No sabía qué podría hacer por él, lo único que podía hacer era apretar su mano, darle un poco de calidez, hacerle saber que siempre estaría a su lado.
Pronto, salieron del lugar.
Spartak condujo, Enzo y Carla se sentaron en el asiento trasero. Enzo cerró los ojos y se recostó en el asiento trasero, sin prestar atención a Carla, ella quería preguntar qué fue exactamente lo que Andreo le había dicho, intentó preguntar varias veces, pero al final no lo
hizo.
Después de un largo rato, él finalmente abrió los ojos y dijo profundamente: “¿Quieres saber qué me dijo Andreo Farré?“.
Carla asintió: “¿Puedes contármelo?“.
Enzo abrió de repente los ojos, la intensidad en ellos desapareció en el instante que vio la preocupación en los de ella. Extendió la mano, la atrajo hacia él, bajó la cabeza y la besó.
Su beso era rápido y apasionado, como el de una bestia cazadora. Los labios de Carla se entumecieron por su beso, pero no se retiró, al contrario, intentó corresponderle lo mejor que pudo.
Después de lo que pareció una eternidad, cuando los labios de Carla estaban casi insensibles, finalmente decidió soltarla.
